Sociedad y Justicia
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Especialistas advierten que se ocasionará más hambruna

Producir etanol eleva precios de alimentos y acelera cambio climático
 
Periódico La Jornada
Sábado 19 de septiembre de 2009, p. 50

Pese a que se experimenta una crisis alimentaria que tiene a más de mil millones de personas en condiciones de hambre y que las expectativas no son optimistas, las naciones destinan cada vez mayores extensiones de tierra al cultivo de productos para generar etanol.

Con ello están sacando los alimentos de la mesa para ponerlos en el tanque de gasolina, con lo que condenan a más seres humanos a la subnutrición, incitan al alza de precios de productos básicos y aceleran el cambio climático por la reconversión de tierras, debido a que los fertilizantes utilizados para lograr estos cultivos contaminan 400 veces más que la quema de derivados del petróleo.

Lo anterior fue planteado durante el ciclo de mesas redondas denominado Encrucijada energética, en el cual se trató el tema Agroenergéticos: comestibles o combustibles, en el que participaron la doctora Consuelo Bonfil, investigadora de la UNAM; Raúl Bennet Keil, de Oxfam México, y Víctor Suárez, de la campaña Sin maíz no hay país.

Bonfil precisó que la tendencia a producir combustibles a partir de alimentos va al alza y que la expectativa es que 30 por ciento de la superficie destinada actualmente al cultivo de maíz en países como Estados Unidos será utilizado para generar etanol en 2015.

En el caso de México, Bennet indicó que dado que aquí no está permitido producir etanol a partir de maíz, se hace de caña de azúcar, y detalló que la previsión es que pasemos de destinar 700 mil hectáreas de este cultivo a un millón 500 mil en 2012 para satisfacer la demanda de etanol.

Subrayó que la caña de azúcar, además de ser un alimento básico que se quita de la despensa para ponerla en el tanque de gasolina, es un cultivo que compite directamente con los campos de maíz, pues es de riego y requiere estar en regiones agrícolas.

Bennet expresó que además este cultivo consume enormes cantidades de agua y de fertilizantes, como el óxido nitroso, y se sabe que una tonelada de éste en la atmósfera corresponde a 400 toneladas de bióxido de carbono, por tanto se acelerará el cambio climático.

Indicaron que según expertos, entre ellos el Nobel de Química 1995, Paul Crutzen, es claro que las parcelas de producción de etanol podrían estar aumentando el nivel de emisiones de efecto invernadero y, por tanto, empeorando el calentamiento global.

La producción de etanol, ya sea a partir de caña de azúcar, sorgo, soya o maíz promueve el cambio de uso de suelo y éste contiene mucho carbono; cuando se abren más tierras de cultivo éste es liberado a la atmósfera. A eso se suma el hecho de la utilización de fertilizantes que incrementan la emisión de gases efecto invernadero; por tanto, los biocombustibles no contribuyen a disminuir esas emisiones.

Tras recordar que el relator especial de las Naciones Unidas sobre el Derecho a la Alimentación, Olivier de Schutter, señaló que debía darse una moratoria de cinco años para detener el avance de la siembra de cultivos para producir etanol, expresaron que sobre todo la utilización de granos forrajeros, como el sorgo, detonará un alza de productos básicos como la leche, el huevo y la carne, fuentes primordiales de proteínas.