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La caída en las exportaciones petroleras, la principal causa de ese resultado, explica

Déficit de la balanza comercial por mil 75 mdd en septiembre, reporta el Inegi

Las ventas de diversos productos al exterior cayeron 28.7% respecto del mismo periodo de 2008

 
Periódico La Jornada
Sábado 24 de octubre de 2009, p. 29

La balanza comercial alcanzó un déficit de mil 75 millones de dólares durante septiembre, atribuible una vez más a la caída en las exportaciones petroleras, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Con tal cifra, el saldo acumulado entre las compras y ventas al exterior realizadas por México durante los primeros nueve meses del año fue deficitario en 4 mil 329 millones de dólares.

El instituto precisó que de enero a septiembre de 2009, las exportaciones alcanzaron un desplome de 28.7 por ciento respecto del nivel que tuvieron en el mismo periodo del año pasado, mientras que las importaciones bajaron 29.6 por ciento.

La situación es todavía más crítica para las exportaciones de productos petroleros ya que por sí solas se derrumbaron 51 por ciento en el periodo mencionado, lo que representa más del doble respecto de la caída de 23 por ciento registrada para las exportaciones no petroleras.

En términos de valor, el total de las exportaciones rebasó los 162 mil 496 millones de dólares en los nueve meses pasados, pero las importaciones ascendieron a 166 mil 826 millones de dólares.

El Inegi precisó que sólo durante septiembre el valor de las exportaciones fue de 20 mil 742 millones de dólares, lo que implicó una disminución de 17.3 por ciento en relación con el mismo mes de 2008. En cambio, el valor de las importaciones se ubicó en 21 mil 818 millones de dólares, lo que implicó una caída de 22.1 por ciento respecto de septiembre del año pasado.

Explicó que el déficit de la balanza comercial de septiembre se debió a una disminución de 258 millones de dólares por la venta al exterior de productos petroleros tanto en ese mes como durante agosto y refirió que el precio promedio por barril en septiembre fue de 64.10 dólares, tres dólares por debajo de la tarifa de agosto.

De hecho señaló que las exportaciones petroleras cayeron 19.8 por ciento y las no petroleras 16.9 por ciento. En el caso de los productos agropecuarios, indicó que crecieron en 10 por ciento y entre ellos destaca el caso del ganado vacuno que registró un incremento de 240 por ciento.

En la balanza petrolera, el Inegi acotó que la mayor parte de la reducción del valor de las exportaciones de crudo será compensada por la cobertura petrolera que adquirió el gobierno federal, pero los ingresos por dicha cobertura dependerán de la evolución del precio que alcance el barril del crudo a nivel internacional y sólo serán registrados hasta el último trimestre de 2009, cuando venza dicho seguro.

Por el momento, la balanza comercial de los productos petroleros indica que durante los nueve meses considerados se ha mantenido un superávit, al grado que el acumulado rebasa los 6 mil 199 millones de dólares, pero las cifras se tornan negativas si se comparan con los registros del año pasado.

Entre las exportaciones no petroleras, el sector automotriz mostró cierta mejoría porque de registrar caídas de entre 14 y hasta 30 por ciento en los meses previos en las ventas hacia Estados Unidos, en septiembre el retroceso sólo fue de 3.7 por ciento. No obstante, la caída acumulada durante los tres trimestres anteriores es del orden de 32 por ciento, en contraste con el 23 por ciento correspondiente a todas las exportaciones no petroleras.

Otros productos afectados en sus ventas al exterior durante septiembre fueron los siderúrgicos, cuyas exportaciones se desplomaron 46.9 por ciento respecto de igual mes del año pasado, así como los equipos y aparatos eléctricos y electrónicos, que reportaron un descenso de 24 por ciento en términos anuales.

Por último, las importaciones de bienes intermedios cayeron 20 por ciento y las de bienes de consumo retrocedieron 30 por ciento en términos anuales, lo cual también es atribuido por el Inegi a la disminución en la importación de productos petroleros como las gasolinas y el gas butano.