En Tijuana, Baja California, 13 presuntos integrantes del cártel de Sinaloa fueron detenidos por soldados que les incautaron fusiles, pistolas, miles de cartuchos útiles y varios vehículos camuflados al estilo militar. En la vecina Ensenada, la policía estatal capturó a seis integrantes de la banda de los Arellano Félix, encabezada por el jefe de guardaespaldas local de Fernando Sánchez Arellano, El Ingeniero.

Los del cártel de Sinaloa, bajo las órdenes de Raydel López Uriarte, fueron atrapados la madrugada del sábado tras un tiroteo con efectivos de la Segunda Zona Militar que los rastreaban en las inmediaciones del parque Paraíso Azteca, de la delegación La Presa. Un gatillero murió, un soldado resultó herido y se confiscó el arsenal y el equipo táctico.

En Ensenada, policías estatales persiguieron y detuvieron un vehículo con placas de Arizona cuando circulaba a exceso de velocidad. Se dijo que su conductor, Víctor Cárdenas Yamamoto, de 33 años, confesó ser asesino a sueldo del cártel de los Arellano Félix.

En el vehículo había nueve cargadores calibre 7.62 abastecidos con 196 cartuchos, 12 cargadores calibre 223 con 315 balas, una subametralladora Uzi y un rifle de asalto R-15. El sospechoso dijo que en la cercana colonia Buenaventura lo esperaban varios secuaces para realizar un trabajo.

Policías estatales fueron movilizados a la zona y detectaron a cinco sujetos armados a bordo de dos vehículos, quienes también fueron detenidos y confesaron, entre otros, el asesinato de Jorge Iván Veloz Robles, al parecer miembro disidente del mismo cártel en Ensenada.

También en Tijuana tuvo lugar otro asesinato durante un ajuste de cuentas pandilleril. Otras siete ejecuciones ocurrieron en Chihuahua, cinco en Jalisco, cuatro en Guerrero y una en Sinaloa.

Antonio Heras, Rubén Villalpando, Sergio Ocampo Arista y Javier Valdez, corresponsales