Sociedad y Justicia
Ver día anteriorMartes 29 de diciembre de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El fenómeno ocasionará decremento en la producción de maíz, advierte el instituto

Prevé INE pérdidas agrícolas en México hasta por $22 mil millones por cambio climático

Considera que es importante fortalecer la estructura de apoyo al campo ante los riesgos ambientales

Foto
De acuerdo con el INE, las principales afectaciones al maíz se darían en las fases críticas de su cultivo, como la floración, la formación o el llenado del grano. La imagen, en AtencoFoto Víctor Camacho
 
Periódico La Jornada
Martes 29 de diciembre de 2009, p. 26

El cambio climático ocasionará un decremento en la producción de maíz, y en todo el sector agrícola mexicano hay una potencial pérdida económica que oscila entre 16 mil y 22 mil millones de pesos, indica el Instituto Nacional de Ecología (INE) en la Cuarta Comunicación Nacional ante la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

Precisa que de acuerdo con estudios que se han realizado en el centro del país, así como en los estados de Chiapas y Jalisco, se daría una afectación potencial en las fases críticas del cultivo del maíz, como es la floración, la formación o el llenado del grano, en caso de que los incrementos de temperatura coincidan con alguna de estas fases.

Refiere que algunos de los efectos directos del cambio climático en la agricultura podrían presentarse de manera diferenciada en algunas regiones, de acuerdo con sus condiciones particulares.

Detalla que se daría un incremento en el periodo libre de heladas en las zonas de cultivo, que se traduciría en un mayor periodo útil para el desarrollo de algunos cultivos y aumento en el número de ciclos agrícolas por año, además de que habría reducción en la superficie cultivable y en los rendimientos generados en zonas de temporal, esto debido al aumento en la duración e intensidad de la sequía.

Agrega que se prevén afectaciones en la disponibilidad de agua en los distritos de riego del noroeste del país, así como reducción en la precipitación y aumento en la temperatura que limitará la producción.

Indica que en los distritos de riego de las zonas áridas de México es importante desarrollar acciones de adaptación, con ajustes en las asignaciones anuales de agua, en la temporada de siembra, en las especies y variedades cultivadas, además de mejorar las prácticas de manejo para adaptarse a las condiciones esperadas.

Para cultivos perennes, con fecha de siembra típica del ciclo otoño-invierno, los requerimientos de riego pueden aumentar a medida que el cambio climático se intensifique. Ante la reducción en la disponibilidad de líquido, indica que se requerirá un nuevo manejo en los embalses y en la capacidad de los canales para suministrar el líquido en los periodos críticos de los cultivos.

La respuesta de la agricultura al cambio climático tendría que incluir medidas de adaptación planificadas que consideren acciones coordinadas entre agricultores, asociaciones, universidades, centros de investigación, empresas y gobierno. Las estrategias de adaptación a corto plazo pueden basarse en la modificación o mejora de las prácticas agrícolas actuales.

Precisa que muchas de las medidas son relativamente sencillas, como los cambios en las fechas de siembra y en las variedades usadas, rotación de cultivos, y el uso de métodos y sistemas para la conservación de la humedad del suelo. Sin embargo, es necesario adaptar los sistemas agrícolas a las nuevas condiciones climáticas.

Considera que es importante fortalecer la estructura de apoyo al campo en materia de riesgo climático, ya que las proyecciones para la mayor parte del país, bajo escenarios de cambio climático, muestran reducciones de producción en las zonas más importantes.