Dieciséis personas fueron asesinadas ayer por el crimen organizado en Chihuahua, mientras Miguel Ángel Guzmán Fernando, presunto pistolero del cártel de Sinaloa, que dirige Joaquín El Chapo Guzmán, fue abatido por policías federales durante un tiroteo que duró casi una hora, en el kilómetro 66 de la carretera Ojinaga-Bahía de Kino, junto a la iglesia de San Miguel de Carretas, en el municipio de Gran Morelos.

La población serrana fue sitiada por policías y agentes de la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP), la cual informó que dos de sus integrantes resultaron heridos cuando los sicarios atacaron con granadas de fragmentación; hay cuatro detenidos.

Nueve de las víctimas son de Ciudad Juárez, entre las que figura el custodio del penal local Isaías Tapia Briceño, quien fue abatido por sicarios en la colonia Revolución Mexicana, así como una mujer que luego de ser brutalmente golpeada con piedras, sus atacantes la atropellaron durante la madrugada, en la colonia 16 de Septiembre.

Asimismo, fueron ultimados Jesús Alonso Quiroz Servín, de 43 años; su hijo, César Alonso Quiroz Cruz, de 19, y Javier Gómez Cruz, de 22, cuando se hallaban en una vivienda en el poblado Sauce del Socorro, municipio de Moris.

En tanto, la Procuraduría General de Justicia de Durango confirmó la ejecución de 10 personas, dos de las cuales ocurrieron en el municipio de Pueblo Nuevo y ocho en Gómez Palacio. En esta última localidad cinco de las víctimas fueron baleadas cuando circulaban en una camioneta por la colonia Santa Rosa. Mientras, en Tijuana, Baja California, hubo cuatro asesinatos que fuentes oficiales atribuyeron al crimen organizado.

Otras cuatro ejecuciones reportadas ayer ocurrieron Sinaloa. Entre las víctimas se encuentra Bárbaro Torres Germán, hermano de un juez del fuero común del municipio de Ahome, quien fue ultimado a tiros en la comunidad de Aguaruto, municipio de Culiacán, según informaron sus familiares.

También fue asesinado el policía municipal de Navolato Fermín Francisco Ulloa López, de 36 años, en la comunidad de La Cofradía, cuando sujetos que viajaban en 10 vehículos le dispararon; según testigos, el agente respondió al fuego y lesionó a varios atacantes.

Mientras, en Celaya, Guanajuato, La Familia Michoacana se atribuyó uno de los homicidios ocurridos ayer. En Tepotzotlán, estado de México, también se reportó una ejecución.

Entre las 41 ejecuciones ocurridas ayer, una tuvo lugar en Coyuca de Catalán, Guerrero, donde también hubo tres ataques contra policías federales y estatales en distintos puntos de la entidad.

En Sonora hubo tres asesinatos, dos de las víctimas aparecieron decapitadas en la cajuela de un automóvil sin placas, abandonado en la colonia Lomas de Fátima, del municipio de Nogales, mientras las cabezas estaban cerca de ahí, en una hielera.

Por último, en Morelia, el secretario de Gobierno de Michoacán, Fidel Calderón Torreblanca, dijo que el viernes pasado sucedieron varias cosas extrañas, cuando la alcaldesa de Tiquicheo, María Santos Gorrostieta, sobrevivió a un segundo atentado en Ciudad Altamirano, Guerrero, entre ellas que no le fue permitida la compañía de sus dos escoltas por estar fuera de jurisdicción, y que tras llegar tarde a la reunión programada y enfilar adonde se le dijo que habría una comida, le salieron al paso los atacantes.

Rubén Villalpando, Saúl Maldonado, Antonio Heras, Javier Valdez, Ulises Gutiérrez, Ernesto Martínez, Carlos García, Sergio Ocampo, Misael Habana y Silvia Chávez. Con información de Gustavo Castillo