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Pues bien, luego de muchas visitas a nuestro país, Tony Levin regresa este marzo (2 y 3), para presentar en el Lunario su trío StickMen al lado del baterista Pat Mastelotto y del también stickista y percusionista Michael Bernier. A propósito de cuándo, cómo y por qué formó tan extraño combo, Levin responde en exclusiva para La Jornada Semanal: “Empezamos a tocar hace un año y medio, pues tenía tiempo deseando saber hasta dónde podía llegar el stick y porque resulta mucho más fácil hacer giras con una banda pequeña. Así, desde el lanzamiento del disco StickMan (2008), mi composición fue volviéndose más arriesgada y, como Michael Bernier es un gran instrumentista y buen compositor, las cosas fueron dándose naturalmente para que creáramos juntos. Ya luego invitamos a Pat y dimos los primeros shows. Entonces logramos identidad.” Por su lado, Pat Mastelotto comenta: “Tony me invitó originalmente para que creara ritmos y loops electrónicos que pudiera manipular a su antojo en su disco StickMan. Luego sugirió el tour al lado de Michael quien, además de tocar el stick de manera novedosa, es un gran percusionista y cantante. Su voz alta se complementa muy bien con la tesitura barítono de Tony.” Como si la fama de Mastelotto no lo precediera, Levin abunda: “Pat es el baterista perfecto porque no sólo ha sido innovador en King Crimson, sino en su forma de combinar lo acústico con lo electrónico. Ha encontrado formas muy creativas para aumentar la sensación rítmica de un beat y para improvisar sobre él. Gracias a ello pudimos perfeccionar el proyecto sobre el escenario, ahí donde una banda realmente se constituye. Hemos tocado mucho en Europa y Estados Unidos, componiendo más música y volviéndonos más distintivos. Ahora incluso tocamos una versión muy personal del ‘Pájaro de fuego' de Stravinsky y cuatro temas Crimson. Por ello haremos otro disco este mismo año.” Es importante decir, entre paréntesis, que cada uno de estos músicos es líder de otros proyectos. Mastelotto, verbigracia, lanzó recientemente su muy interesante álbum electroacústico Tunisia al lado de la thereminista Pamalia Kurstin. A propósito de ello el baterista comenta: “Pamalia es la mejor thereminista del mundo. Lo que hace es asombroso. Coincidimos en algunos shows y pensé que podríamos trabajar juntos. Así, en dos ocasiones que visitó Austin la llevé a mi estudio y grabamos por horas. La tercera visita fue definitiva. Trabajamos cinco días y terminamos el disco.” Con una producción personal escasa y no muy bien criticada, Tony Levin ha dejado una profunda y hermosa huella en cientos de discos ajenos (el So, de Peter Gabriel, por ejemplo, cuyas líneas de bajo son monumentales). Gracias a ello conoce el mundo entero, lo que expresó bellamente en el álbum debut World Diary (1995). He aquí su opinión sobre su experiencia azteca: “He querido ir con esta banda a México desde que nació. Fui hace poco con otro proyecto y bueno, también tengo recuerdos muy especiales de mis visitas con Crimson y Peter Gabriel. Ustedes tienen un aprecio muy especial por la música con significado; incluso más que en otras partes del mundo. Eso es importante para lo que hago. Por ello, además de nuestra música y del repertorio que he mencionado, tocaremos improvisaciones y alguna composición hecha para la ocasión, pues queremos que esa noche tenga algo único y especial.” Cabe mencionar, finalmente, que cualquier lector melómano puede disfrutar la presentación de StickMen. Pese a su vena progresiva y experimental, el resultado son canciones entretenidas y vibrantes cuya ejecución causa asombro inevitablemente. En tiempos como éstos, en situaciones como éstas, tan llenas de dificultades económicas y climáticas, los sonidos de un conjunto así animan el espíritu y tensan los músculos vitalmente. Que vaya el que nos crea. |