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Los infiltrados
 
Periódico La Jornada
Miércoles 17 de marzo de 2010, p. 9

Enrique Camarena. Trabajaba en México como agente encubierto de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA). Operaba básicamente en Guadalajara y Sinaloa; seguía, supuestamente, la pista de traficantes mexicanos como Rafael Caro Quintero y Miguel Félix Gallardo, quienes fueron acusados de ser los autores de su plagio, el 7 de febrero de 1985, y de su asesinato dos días después.

Humberto Álvarez Machain. Como parte de sus investigaciones, agentes de la DEA viajaron a México en abril de 1990, secuestraron y llevaron a Estados Unidos al doctor Humberto Álvarez Machain, supuesto médico que atendió al agente Enrique Camarena Salazar antes de morir. Luego de dos años de juicio en aquella nación, fue absuelto.

Operación Casablanca. En octubre de 1996, después de una investigación de tres años, agentes encubiertos de la DEA y del Servicio de Aduanas de Estados Unidos obtuvieron información de diversas dependencias mexicanas: Secretaría de Hacienda, Banco de México y Comisión Nacional Bancaria y de Valores, y detuvieron a funcionarios de instituciones bancarias de Venezuela, Colombia y México, lo que puso al descubierto una red de lavado de dinero de los cárteles de Juárez y de Cali.

Narcofosas. En enero de 2007, agentes de la DEA y del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), participaron con personal de la Procuraduría General de la República (PGR) en la busca de restos humanos en las llamadas narcofosas halladas en el municipio de Uruapan, Michoacán. Esa no fue la única ocasión en que se permitió trabajar a agentes extranjeros en México. En noviembre de 1999, en el rancho La Campana, agentes de la DEA, la FBI y la PGR descubrieron la inhumación clandestina de más de 50 personas; unos 10 cuerpos correspondían a ciudadanos estadunidenses y otro a un agente de ese país (La Jornada, 14/03/2008).

Los agentes en México. Más de mil 400 agentes del gobierno de Estados Unidos operan en México en labores de combate al crimen organizado e inteligencia. Unos 700 son ciudadanos mexicanos. Trabajan principalmente para dependencias como el ICE, y la DEA, revelaron funcionarios del gabinete de seguridad nacional.

La penúltima. En septiembre de 2007, un agente de la FBI vinculado a la DEA, a quien hoy sólo se identifica como Jenifer, realizó investigaciones en México que desembocaron, en noviembre de 2008, en la llamada Operación Limpieza y llevaron a la captura de los principales mandos de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada.