París, 26 de marzo. Representantes de la Iglesia católica en Europa concentraron el viernes su apoyo al papa Benedicto XVI y rechazaron las acusaciones de que encubrió abusos sexuales de sacerdotes contra menores, elogiándolo como un líder resuelto a combatir los escándalos que desafían al clero.

La conferencia de obispos de Francia, el arzobispo de Londres y la arquidiócesis de Munich, a la que alguna vez perteneció Ratzinger, rechazaron las acusaciones de la prensa un día después de que el Vaticano dijera que sus críticos habían lanzado un intento innoble por difamarlo.

También el viernes, el obispo Adrianus van Luyn, jefe de la conferencia de obispos de Holanda, admitió que hace tres décadas tuvo conocimiento de los casos de abusos en el país revelados hace un mes. Más de mil 100 personas han denunciado desde entonces casos de abuso sexual.

En una nota publicada en el London Times, el arzobispo Vincent Nichols dijo que el Papa había hecho cambios importantes para luchar contra los abusos de menores cuando era un alto funcionario doctrinal del Vaticano.