Directora General: CARMEN LIRA SAADE
Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER  
Domingo 28 de marzo de 2010 Num: 786

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La poesía sabe hacerese cargo de sí misma
RODRIGO GARCIA LOPES entrevista con MICHAEL McCLURE

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Falsas señales del Oriente cercano: lecciones de chutzpah (I DE II)

La palabra chutzpah en yiddish significa “audacia”, “atrevimiento arrogante”,
“insolencia” o “descaro”, y es una cualidad para el bien o para el mal

EL FALSO INFARTO

El 20 de enero pasado Mahmoud al-Mabhouh, llegó a Dubai a las 3:17 pm. Las cámaras de seguridad del aeropuerto registraron su llegada, así como la del grupo de asesinos que lo seguía. Más tarde él y sus perseguidores fueron videograbados por las cámaras del lujoso hotel Al Bustan Rotana, donde cinco horas más tarde lo asesinaron en la habitación 230. Al-Mabhouh era un militante palestino de Hamas a quien se responsabilizaba de haber matado a dos soldados israelíes en 1989 y de haber sido el enlace entre su organización y el gobierno iraní, encargado de adquirir armas del gobierno de Teherán. La operación se llevó a cabo con un descuido y desparpajo que, de no tratarse de un crimen, sería cómico: con agentes lampiños entrando a elevadores y saliendo de ellos con barba, o apareciendo calvos en una cámara y con peluca y lentes en la siguiente. El hotel Al Bustan tiene una curiosa estructura circular semejante a un panopticón, desde el atrio es posible ver las puertas de las habitaciones. Esto lo hace un sitio ideal para conducir una operación como ésta, ya que ofrece la posibilidad de vigilar a la víctima en todo momento, pero a la vez presenta riesgos pues los agentes debían exponerse constantemente a las cámaras, lo cual no pareció preocuparles. Diríase que los asesinos no desperdiciaron una oportunidad para posar para las cámaras. Al-Mabhouh salió a caminar por la ciudad y a su regreso un grupo de asesinos lo esperaba en su habitación. El palestino fue encontrado muerto, aparentemente de un infarto, en su habitación. Hubiera parecido una muerte natural de no ser porque el forense descubrió un par de incisiones sospechosas y, tras un examen toxicológico, demostró que había sido inyectado con una dosis mortal de succinilcolina, un poderoso relajante muscular que paraliza inmediatamente a la víctima y simula un ataque cardíaco en unos 15 minutos. Pero algo debió salir mal, o los asesinos se pusieron nerviosos o simplemente tuvieron un ataque de chutzpah, ya que además usaron una almohada para sofocarlo por un par de minutos.

LA FALSA INCOMPETENCIA


Pasaportes fraudulentos de la Mossad

En poco tiempo la policía de Dubai identificó a veintisiete agentes que emplearon pasaportes británicos (doce), irlandeses (seis), alemanes (uno), franceses (tres), australianos (tres) y dos palestinos. Por lo menos la mitad de esos pasaportes pertenecían a ciudadanos israelíes con doble nacionalidad (siete israelíes han declarado que su identidad fue robada para esta misión). A muy pocos les quedó la menor duda de que se trataba de una operación de la agencia de espionaje Mossad. El gobierno israelí, fiel a su política de ambigüedad, no confirmó ni negó su responsabilidad. Las fotos de los presuntos implicados aparecieron publicadas en los periódicos del mundo y ninguno de los supuestos asesinos protestó su inocencia. De ser agentes de la Mossad, esto representa el fin de sus carreras en operaciones internacionales, ya que sus características biométricas ahora están en las bases de datos de Interpol y otras agencias. La preparación de un agente dura unos cinco años y cuesta miles de dólares, por lo que sorprende que el Estado estuviera dispuesto a sacrificar a tantos agentes en una operación aparentemente menor. A pesar de la supuesta torpeza de los agentes, el asesinato fue un éxito, pero Israel irritó a la Unión Europea al emplear documentos robados y falsificados. Un asesinato como éste no sólo es importante por quien es el blanco, sino también por la forma de asesinarlo y el momento elegido para hacerlo. En un ejercicio supremo de chutzpah, parece que no sólo eligieron matarlo para enviar un mensaje a Hamas y a Irán, sino también como desafío y provocación al mundo, especialmente tras la publicación del reporte del juez sudafricano Richard Goldstone, respecto del ataque israelí contra Gaza en enero de 2009, en donde se condena a Israel de “un ataque deliberadamente desproporcionado, diseñado para castigar, humillar y aterrorizar a la población civil”, por el cual algunos israelíes deberán “confrontar responsabilidad criminal individual”. En cualquier caso, ninguno de los gobiernos ofendidos tiene la menor intención de castigar a los responsables.

LA FALSA ANSIEDAD

Al tiempo en que Occidente se da golpes de pecho y lanza alaridos de angustia ante el espectro de un Irán nuclear, Israel, un Estado que, como es bien sabido, tiene un portentoso arsenal atómico, acaba de anunciar que construirá en colaboración con Jordania una planta nuclear (su tercera) para producir electricidad. Jordania inmediatamente desmintió la información, ya que incluso un Estado servil a EU como ése sabe que una acción semejante sería una pésima estrategia de relaciones públicas entre los árabes. El gobierno de Amman declaró que no estaba listo para semejante compromiso hasta que se resuelva el conflicto palestino. La ironía radica en que Israel, que no es signataria del tratado de no proliferación atómica, bombardeó en septiembre del año pasado unas instalaciones en Siria con el argumento de que estaban construyendo una planta nuclear, y además está tratando desesperadamente, por cualquier medio, de detener el programa atómico iraní. ¿Quién quiere chutzpah?