 |
Directora General: CARMEN LIRA SAADE Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER Domingo 11 de abril de 2010 Num: 788 |
|
Bazar de asombros El último cierre En los días soleados de invierno George Steiner: otra visita al castillo de Barba Azul René Magritte Presentación El paso de la realidad a la poesía y al misterio El Surrealismo y Magritte El surrealismo a pleno sol El terremoto de Chile: qué y cómo Un pensador errante Columnas: |
Zappa celebra a Zappa, en MéxicoHace un par de años, al sumarse tres lustros de la muerte de Frank Zappa, terminamos esta misma columna diciendo: “Oportunidad para revalorarlo, la que nos da este diciembre será importante pues pasarán cinco años más para que, cumplidas dos décadas sin Zappa, hojeemos las múltiples revistas especializadas que hablarán sobre su obra, su lucha contra el establishment político y religioso, contra la censura y la libertad de discurso (protestó en el senado por las iniciativas de la esposa de Al Gore)... Sea pues, encendida está la veladora para que su talentoso hijo, el guitarrista Dweezil Zappa, continúe dándole vida al proyecto Zappa Plays Zappa, conjunto con invitados de lujo abocado a mantener el eco de su padre.” Pues bien, justamente será este 2010, ahora con motivo de su natalicio número setenta, cuando podremos congratularnos por ver cumplida nuestra premonición y, más aún, porque nos toca de manera directa. Finalmente Zappa Plays Zappa se presentará en México (2 de junio) para celebrar la obra de un titán que supo cruzar todos los géneros del espectro musical con sentido del humor y un gran compromiso estético. Sumándose a los aniversarios por las muertes de John Lennon, Jimi Hendrix y Janis Joplin y el natalicio setenta y cinco de Elvis Presley, éste de Frank Zappa nos regala el pretexto perfecto para que su hijo, el mencionado Dweezil Zappa, se monte sobre buena parte de su repertorio, liderando a un conjunto en el que inicialmente sonaron colegas de su padre como Terry Bozzio, Steve Vai y Mike Keneally, pero que hoy cuenta con Scheila Gonzalez en el saxofón, flauta, teclados y voces; Pete Griffin en el bajo; Billy Hulting en la marimba y percusiones; Jamie Kime en la segunda guitarra; Joe Travers en la batería y coros más Ben Thomas como cantante principal. Todos ellos son músicos jóvenes provenientes de muy distintos universos sonoros. Algunos han girado con grupos de jazz como los de Maynard Ferguson, Patti Labelle, Lionel Hampton y Diane Schuur, otros han participado en las bandas de Natalie Cole y Barry Manilow y unos hasta han prestado servicio a conjuntos pop-rock ,como los de Hanson, Jewel, Duran Duran, Billy Idol y Michelle Branch.
Así las cosas, la posición de Dweezil es curiosa, pero no por ser el hijo de una leyenda del rock que intenta seguir sus pasos, pues tenemos decenas de ejemplos iguales, sino por haber sacrificado su propia figura en pos del cancionero paterno, dedicando su vida a esas palabras que muchos rehuyen con años de terapias: “Sí, soy hijo de, y lejos de pesarme por las comparaciones expandiré su legado abocándome a la interpretación de su obra.” Ello no significa, empero, que este guitarrista usufructúe cómo damente el talento ajeno. Además de virtuoso, ha tenido distintos proyectos con mayor o menor éxito, intentando un desarrollo paralelo al de Zappa Plays Zappa. Al lado de su hermano Ahmet tuvo la z Band y está por lanzar el álbum Go With What You Know en el que hace dúo con su progenitor en torno al tema “Peaches En Regalia”, originalmente dedicado a su nacimiento. Asimismo, Dweezil ha destacado por su trabajo musical para televisión en los programas de los cómicos Ben Stiller y Jamie Kennedy, y ha sido actor en cintas como Pretty in Pink y The Running Man con el governator Arnold Schwarzenegger, actividad en la que se interesó desde su adolescencia cuando fuera conductor de MTV. Ahora está por salir en el filme Fully Loaded. Para quien no lo sepa y a manera de conclusión, las creaciones del “rockero” Frank Zappa son interpretadas continuamente por bandas garage de todo el mundo, pero también por las mejores orquestas clásicas, pues pese a su auto didactismo este compositor fue seguido por directores tan notables como Pierre Boulez y Kent Nagano. Asimismo, su discografía y videografía son casi innumerables y la influencia que tuvo en cientos de músicos fue decisiva para quitarle solemnidad a estilos experimentales y subterráneos, para darle una teatralidad metaconsciente al performance contemporáneo. Con temas de incómodo título y estructura como “Don't Eat the Yellow Snow”, “Punky's Whips”, “Tit ties & Beer”, “Who Needs the Peace Corps?”, “Willie the Pimp” y “You Didn't Try to Call Me”, Zappa fue pionero también en el mundo de la industria independiente y en formas de mercadeo distintas a las de su tiempo, cuando el disco era un negocio saludable, sí, pero que exigía sacrificar demasiado del arte en pos del dinero. Dicho esto, bienvenido seas hijo de Zappa. Ahí estaremos para recordar a tu padre y, claro está, para salir conmovidos por su imaginación. |
