Cuautitlán, Edomex, 11 de mayo. En la semana previa a la visita del presidente Felipe Calderón a Estados Unidos, el embajador de la Casa Blanca en México, Carlos Pascual, afirmó que los inversionistas estadunidenses se tienen que preocupar y analizan los asuntos relacionados con la delincuencia cuando definen sus negocios; por eso consideró necesario crear un ambiente seguro en el país.

Rechazó que exista tensión entre los gobiernos de México y Estados Unidos a causa de la ley antinmigrante de Arizona, dado que los presidentes Barack Obama y Felipe Calderón coinciden en su rechazo a esta medida y analizan incluso la forma de rebatirla ante los tribunales federales.

Entonces aquí no tenemos diferencias y los dos estamos trabajando para tener una mejor reforma de inmigración comprensiva en Estados Unidos, aclaró.

La extradición, un camino

Tras asistir a la reinauguración de la planta Ford Cuatitlán, y el lanzamiento del modelo Fiesta 2011, dijo en breve entrevista que es importante crear una plataforma de seguridad bilateral y puso como ejemplo la extradición de delincuentes como un mecanismo para que se desarrollen nuevas capacidades en el sistema judicial mexicano.

Interrogado sobre si la inseguridad afecta las inversiones, explicó que México es muy competitivo en el terreno económico y los asuntos de seguridad nos tienen que preocupar y tienen que preocupar a las compañías. Por eso es que lo analizan en el proceso de hacer las inversiones y por eso es que también es importante para México, ahora y en el futuro, contar con un ambiente seguro.

Recordó que Calderón había mencionado en la ceremonia que el estado de derecho es una parte crítica y por eso conviene crear una plataforma entre ambos países, como se ha hecho durante los últimos años.

Defendió la colaboración entre los dos gobiernos, porque ha permitido mejorar el entrenamiento de investigadores y de los miembros de la Policía Federal (PF), que han pasado por controles de confianza, así como aumentar el equipo y la movilidad de las fuerzas de seguridad.

El diplomático explicó que las dos naciones tienen que definir cómo van reaccionar ante los narcotraficantes y tener la capacidad de atender lo que quieren los mexicanos: mantener el estado de derecho.

Al preguntarle por qué entonces siguen las ejecuciones, dijo que naturalmente no se cambia de un día a otro ni se resuelven los problemas, dado que la creación de una Policía Federal más eficaz y fuerte y el fortalecimiento del sistema judicial toman tiempo.

Pascual aseguró que la inversión de mil millones de dólares que Ford realiza en México es una muestra fehaciente de que las compañías de Estados Unidos benefician a nuestro país, pero también que éstas ganan competitividad y que la integración de ambas naciones es conveniente en el mercado global.