Opinión
Ver día anteriorViernes 21 de mayo de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Ruta Sonora

Post Vive Grupero

Bomba Estéreo-Liber Terán

La Bienquerida

L

os días 15 y 16 de mayo pasados, Ocesa incursionó en una pretenciosa aventura llamada Vive Grupero, festival que se caracterizó por una bajísima asistencia (quizá no más de 10 mil personas, cuando se esperaban a lo menos 40 mil), a pesar de contar con un gran cartel, para quienes gustan de la música popular. Titulares como Los Tigres del Norte, Tucanes de Tijuana, Ángeles Azules, El Recodo, La Mafia, Gigante de América, K-Paz de la Sierra, entre muchos otros, habrían jalado multitudes, pero sus organizadores erraron en estrategia y en claridad de mensaje: ¿a quiénes esperaban? No se sabía si iba dedicado a quien gusta de esa música pero no quiere embarrarse de lodo en las periferias (acudieron en su mayoría clasemedieros curiosos), en aras de abrir nuevos mercados, o esperaban que la raza les cayera de los árboles, así nada más.

Quienes gozan de esta música, no están acostumbrados a asistir a locaciones como el Foro Sol, pues tales bandas van a sus mismas colonias, y no requieren desplazarse; la cultura social cotidiana de estas personas, su nivel de movimiento y cosmopolitismo, no es tan abierta como la de gente de mayor nivel socioeconómico y educativo. El pueblo es fiel a sus tradiciones y a convivir con gente de su comunidad: algo más familiar, de identificación con el barrio. Para ellos, lugares como el coso de Ciudad Deportiva son vistos con frialdad, cual sitios corporativizados, ajenos en identidad a sus ritos de diversión. Quizá una explanada o rodeo, donde usualmente se lleven a cabo estos conciertos, les habría resultado más familiar.

Ahora, el modelo de festival de dos días en macroforo, extraído desde el nombre del Vive Latino (rock), con tal cantidad de bandas, tampoco es usual en dicha comunidad; en esos bailes no pasa de seis artistas el cartel por día; también están los Palenques, que implican otras actividades con rasgos de feria familiar (juegos mecánicos, puestos de comida, gallos, caballos, artesanías). De hecho, hay que recordar que incluso el VL tuvo que empezar siendo de un solo día y con menos agrupaciones, para irse instalando en el gusto del público. ¿Por qué no tuvieron ahora el mismo razonamiento sus organizadores? Quizá la vanidad tras el éxito del Vive Latino, les llevó a las nubes… mismas que se vengaron con torrenciales lluvias.

También hubo poca difusión en estratégicas estaciones de radio, como La Z y la Ke Buena. ¿Boicot o celos por parte de sus organizadores habituales, que sentían que les estaban comercializando el mandado? Otro enemigo: los precios. Si bien $250 por día no era mucho para tan grande elenco, su público usual paga de $30 a $100 por ver menor cantidad de artistas, pero sabiendo que la pasará mejor, y quizá regrese caminando a su casa, o acabe antes de la media noche. El Vive Grupero acababa más allá de las 12, cuando ya no hay Metro; la mayoría de su público meta carece de automóvil.

Foto
Jorge Hernández, de los Tigres del Norte, durante su participación en el Vive Grupero, el pasado 16 de mayoFoto Marco Peláez

En resumen, a leguas se notó el abismo de criterios entre sus organizadores y quienes pudieron disfrutarlo. Porque hay quienes han dicho: esa gentuza no sabe apreciar un buen lugar de conciertos. Clasista error: más bien, dicho público merece un acto así, pero sus auspiciadores no lo supieron capitalizar. Era triste ver en la noche del domingo, a los magníficos Tucanes de Tijuana o a los enormes Tigres del Norte ante una audiencia de no más de 3 mil personas, cantidad que fue disminuyendo hasta llegar a unos 500, ya con los Tigres. Ambas bandas, que respetan el toque de la polka tradicional y manejan letras relacionadas con el narcotráfico y la identidad familiar y social, se rifaron de igual forma. Conmovedor fue cómo los Tigres actuaron profesionalmente, con la misma intensidad, como si ante una muchedumbre, incluso ejecutando tiempo extra y tocando las complacencias que la escasa gente les pedía. No por nada son tan grandes.

Mayor suerte para la próxima a dicha operadora de conciertos, si es que piensa repetir la hazaña. A continuación, páginas sobre bailongos gruperos: www.bandeando.com.mx , www.dondehaybaile.com y http://bit.ly/cmZQOP

Caribou, Paté de Fuá

Viernes 21: 1. MUTEK presenta, de Canadá, al artista sonoro Dan Snaith, alias Caribou (antes Manitoba), y su caleidoscopio electro-folk y su nuevo disco Swim. También: Toro y Moi, Sanfuentes y Los Amparito. Covadonga (Puebla 121, Roma). 21 horas, $320 en eticket.com.mx 2. Toquín bailonguero con Bomba Estéreo, Liber Terán, entre otros. Pasagüero (Motolinia 33, Centro). 21 horas, $200.

Sábado 22: 2. X Aniversario del Faro de Oriente con el tango-jazz de Paté de Fuá. 16 horas, entrada libre.

Martes 25: De España, La Bienquerida, como acto inaugural de la residencia en México del prestigiado sello ibérico Elefant Records. Intensa y enamorada, muy recomendable. 21 horas, $60. Agenda completa en: http://patipenaloza.blogspot.com