Cultura
Ver día anteriorSábado 22 de mayo de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Obra de Alan Bennett será proyectada en video en el Lunario del Auditorio Nacional

Recurre el arte tradicional a formatos novedosos para adaptarse a la tecnología

Se mete una obra de teatro dentro de la televisión, pero sin que pierda su esencia dramática, explica experto

El montaje no se pudo transmitir en vivo en México, por la diferencia de horarios

Foto
Escena de El hábito del arteFoto Cortesía del Lunario
 
Periódico La Jornada
Sábado 22 de mayo de 2010, p. 5

Acercar el teatro al espectador mediante la tecnología, es decir, la grabación y posterior proyección sobre una pantalla de una puesta en escena.

En lo que respecta a la grabación, es un trabajo que conlleva retos y complicaciones técnicas, pero que resulta una alternativa para aquellos que quieren conocer otras dramaturgias.

Ese formato es una apuesta del Lunario del Auditorio Nacional, espacio donde se puede beber y comer durante la proyección en video de una obra.

En este caso se trata del montaje The habit of art (El hábito del arte), obra escrita por el dramaturgo Alan Bennett, con dirección de Nicholas Hytner, en lo que es la más reciente producción del National Theatre, de Londres.

Dicha agrupación integra como parte de sus actividades el proyecto NT Live, que tiene como propósito transmitir sus obras en vivo vía satélite, a más de 330 salas de cine y centros de artes escénicas de Europa y algunas ciudades de Estados Unidos.

Juego entre la realidad y la ficción

El hábito del arte se grabó el pasado 22 de abril. No obstante, la obra no pudo pasarse en vivo en nuestro país, debido a la diferencia de horarios, además de que se debe llevar a cabo el trabajo de traducción. Por ello se proyecta en video.

De acuerdo con Emma Keith, productora asociada de NT Live, para esta obra se utilizaron seis cámaras distribuidas dentro y fuera del escenario.

“Lo que hacemos –comentó en conferencia de prensa David Sabel, jefe de medios digitales del National Theatre– es meter una obra de teatro dentro de la televisión, pero sin perder su esencia dramática.”

La temporada piloto de ese proyecto se inició en junio de 2009, con la transmisión de Fedra, obra que fue proyectada y vista por alrededor de 50 mil personas en 19 países.

The habit of art es la quinta obra de Alan Bennett para el National Theatre. Entre los premios que ha recibido se encuentran el Lawrence Olivier, Tony y Critics Circle por la Mejor Obra.

The habit of art es una obra en la que se entreteje el teatro dentro del teatro. A partir del ensayo, de la escena en la que un veterano y reconocido escritor y poeta homosexual abre la puerta de su casa a un periodista y biógrafo, a quien confunde con un sexoservidor y “chichifo”, se va entretejiendo un juego entre la realidad y la ficción, entre la obra que se ensaya y la realidad de los actores.

La historia central gira en torno a la vanidad, las desdichas cotidianas, el reconocimiento y el olvido, la madurez, la rutina, la incomprensión, la indolencia, la inspiración, el trabajo o el bloqueo creativo, pero por sobre todo a esa persistencia cuando se ha agotado la pasión y se convierte en hábito el arte.

La situación que plantea la obra, del dramaturgo inglés Alan Bennett, es la reunión de dos grandes creadores en la vida real: el poeta W.H. Auden (1907-1973) y el compositor Benjamin Britten (1913-1976).

En ese juego del teatro dentro del teatro, la obra reflexiona de manera sarcástica sobre el hecho teatral, la identidad y el trabajo creativo de un dramaturgo, una directora y sus actores.

Bennett, comentó la embajadora británica en México, Judith Macgregor, es uno de los primeros dramaturgos que aceptó su homosexualidad y describió los dilemas a los que se tenía que enfrentar. Es un autor cuyo estilo y lenguaje es muy irónico y elegante; está lleno de humor.

The habit of art, con traducción de Lorena Maza, será proyectada por segunda y última ocasión el 24 de mayo, a las 20 horas, en el Lunario del Auditorio Nacional (Paseo de la Reforma y Campo Marte, Bosque de Chapultepec).

La obra dura dos horas 25 minutos, tiene intermedio y se recomienda para mayores de 15 años, pues ciertas escenas contienen lenguaje y referencias sexuales.