Política
Ver día anteriorDomingo 7 de noviembre de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

A la Basílica de Guadalupe sólo ingresa dinero limpio, asegura

La autoridad debe citar a curas que reciban narcolimosnas: Diego Monroy
 
Periódico La Jornada
Domingo 7 de noviembre de 2010, p. 6

La descomposición generada por el narcotráfico ha llegado a todos los niveles: gobierno, empresarios y religiosos, lamentó el rector de la Basílica de Guadalupe, Diego Monroy Ponce, quien señaló que los integrantes de la Iglesia católica tienen conciencia de que no deben recibir dinero ilícito que está manchado de sangre y violencia, pero reconoció que eso no da la certeza de que falle uno que otro.

A dos semanas de que se conoció que Heriberto Lazcano, El Lazca, jefe del cártel de Los Zetas, habría aportado dinero para construir un templo en la colonia El Tezontle, en Pachuca, Monroy insistió en que los religiosos que acepten narcolimosnas deben ser citados a comparecer ante las autoridades adecuadas.

Aseguró que la Iglesia insiste en que los ofrecimientos sean del fruto del trabajo limpio de los fieles.

En el caso de la basílica dijo tener la absoluta certeza que el dinero que ingresa al templo vía los benefactores y las donaciones es limpio, jamás se ha recibido algo sucio o ilícito, y dijo que no aceptaría un solo peso partido por la mitad si supiera que no es producto del trabajo honesto.

–¿Ha llegado dinero sucio a la Basílica?

–No, jamás, nunca. La gente hace donaciones, las deposita en las alcancías; esa donación es secreta, pero cuando es pública es de gente conocida. Por ejemplo, los que colaboran conmigo en la construcción de la Plaza Mariana [que costará cerca de mil 200 millones de pesos, la mayor parte aportada por el empresario Carlos Slim], ése es dinero limpio; son aportaciones de gente que está dispuesta a colaborar para agrandar esta casa de la señora del cielo.

Entrevistado tras inaugurar una jornada médica en la explanada de la basílica, mencionó la responsabilidad de los integrantes de la Iglesia de hablar con las autoridades cuando tengan información sobre el crimen organizado y, así, abordó el tema de los dichos del arzobispo de Durango, Héctor González Martínez, quien esta semana nuevamente habló de El Chapo Guzmán.

“Si alguien hace una declaración [sobre estos temas] vayan y díganle ‘por qué no has denunciado, por qué no hablas’.”

Al preguntársele si no es extraño que un miembro de la jerarquía haga estos comentarios, Monroy dijo que esto sucede hasta en las mejores familias.

Remarcó que a los curas les preocupa esta situación de violencia. Nos lastima, nos duele que nuestro país se nos manche de sangre, desde la de los niños que son asesinados en el vientre de la madre hasta los que mueren en el encuentro con bandas de delincuentes, por la extorsión, la violencia, el narcotráfico y los secuestros.

Consideró que es la corrupción el lastre y el cáncer más tremendo que padece el país y la que ha posibilitado el avance del crimen organizado, el cual lamentó que esté sumando a sus filas a familias enteras. Antes, si había un miembro de la familia que andaba metido en estas cosas ilícitas, se le reprendía o retiraba de la familia, y ahora son familias completas las que entran en estas situaciones ilícitas; eso nos lastima porque el núcleo familiar está siendo cada día desviado de su objetivo, que es ser fuente de vida, integración y comunión y ahora se suma a la violencia, al narcotráfico.