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Buscan combatir desnutrición en Hidalgo

Crean galleta de alto valor nutritivo a partir de lombrices y chaya
Corresponsal
Periódico La Jornada
Viernes 21 de enero de 2011, p. 3

Pachuca, Hgo., 20 de enero. Con un elaborado con harina elaborada con lombrices (Eisenia foetida) y la planta silvestre conocida comúnmente como chaya, científicos de la Universidad Tecnológica de la Huasteca Hidalguense (UTHH), con sede en Huejutla, intentan combatir los altos índices de desnutrición de esa región del estado.

Este proyecto se suma a otros, como el del maíz enriquecido QPM, que puso en marcha el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) en 2004 con niños de la comunidad de El Moreno, en el municipio de Huejutla, en colaboración con el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap) y las secretarías de Salud (estatal) y de Agricultura y Ganadería.

De acuerdo con la evaluación del CIMMYT las comunidades de la región de la Huasteca hidalguense se caracterizan por ser de alta o muy alta marginación, y los problemas de desnutrición infantil están catalogados de importantes a severos. Esto ha motivado que expertos en nutrición experimenten con alimentos como la soya y el amaranto.

Matías Rodríguez Reyes, investigador de la UTHH, informó que a partir de la mezcla de lombrices y chaya se producirá harina para la fabricación de lo que denominó biogalletas, con alto contenido nutricional.

El alimento se podría distribuir a bajo costo entre la población infantil la zona de la Huasteca, que padece los estragos del hambre.

Explicó que se trata de un nutriente que se procesará con las lombrices obtenidas con la fermentación de trozos de frutas y verduras, que una vez combinadas con la chaya se transformarán en harina.

Rodríguez Reyes, experto en tecnología de alimentos, aseguró que la biogalleta podría contribuir de manera muy importante a balancear las dietas para niños y jóvenes, pues posee un alto valor nutritivo, 78 por ciento del cual proviene de las lombrices. La chaya aporta el calcio.

La harina resultante es más nutritiva, incluso, que la espinaca, dijo el investigador de la UTHH.

Explicó que la elaboración de la biogalleta es de bajo costo, ya que las lombrices son producidas por la universidad mediante un proceso de fermentación. Además, el producto no representa ningún riesgo para la salud de quien lo consume.