Puebla, Pue., 1º de febrero. En el nuevo gobierno estatal no habrá persecución, pero tampoco encubrimiento, advirtió Rafael Moreno Valle Rosas en su primer mensaje como mandatario.

Haremos una revisión puntual del ejercicio de los recursos de la pasada administración con la única premisa de aplicar la ley, dijo. Esto no sólo se aplica a los servidores públicos, pues nadie está por encima de la ley, subrayó el mandatario, cuyo triunfo rompió 80 años de hegemonía priísta.  

A unos metros, en un discreto asiento en el extremo izquierdo, se hallaba su antecesor, Mario Marín Torres. Pocos se habían percatado de su presencia. Cuando Moreno Valle hizo la salutación general, la mención del ex gobernador provocó un abucheo que retumbó en el Centro Expositor y de Convenciones de esta entidad, adonde ingresaron más de 25 mil personas.

Las muestras de repudio se extendieron a las principales avenidas de la capital poblana, donde fueron colocadas mantas alusivas al góber precioso, como se le conoce desde 2005 por la forma en que lo llamó el empresario Kamel Nacif, presuntamente vinculado con una red de pederastas.

Ante la rechifla y el mensaje de Moreno Valle, Marín sólo comentó en entrevista posterior- que se va tranquilo y no teme una cacería de brujas.

En cambio, los reflectores, aplausos y saludos efusivos fueron para la lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo, quien ocupó un lugar preferente, justo frente al mandatario, entre el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro, y el gobernador de Morelos, Marco Antonio Adame.

Ecos de Guerrero

Los asientos resultaron insuficientes para todos los funcionarios, dirigentes de partidos, legisladores, y otros políticos que acudieron a la ceremonia.

El ahora gobernador de Puebla agradeció la asistencia abundante y plural. Ante él estaban quienes seguían festejando la trascendencia histórica de la coalición opositora integrada por los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD), Nueva Alianza (Panal) y Convergencia, que ganó el pasado 4 de julio, pero también por el reciente éxito en Guerrero, donde arrasó la unión de partidos de izquierda y derecha.

En primera fila estaban Gustavo Madero (PAN), Jesús Ortega (PRD), Luis Walton (Convergencia) y Jorge Kahwagi (Panal), acompañados de asistentes, legisladores y dirigentes locales.

También acudieron líderes de los partidos del Trabajo y Verde Ecologista de México, el gobernador de Oaxaca, Gabino Cué, así como la dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Beatriz Paredes, y los mandatarios priístas de Querétaro, Veracruz y Tlaxcala; el electo de Hidalgo y el diputado Luis Videgaray, en representación del gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto.

El jefe del Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, quien insistió en que una alianza opositora vencerá al PRI en el estado de México.

–¿También en alianza con el PAN en 2012?

–Ya veremos –respondió.

Estaba prevista la asistencia del virtual ganador de las elecciones en Guerrero, Ángel Aguirre, pero no se presentó, mientras el panista Diego Fernández de Cevallos regresó intempestivamente a la capital del país y ofreció disculpas.

En representación del presidente Felipe Calderón acudió el secretario de Gobernación, Francisco Blake Mora, entre otros funcionarios del gabinete federal.

El gobernador reconoció algunos de los rezagos que enfrentará: casi 60 por ciento de las familias padecen pobreza patrimonial; casi 70 por ciento de sus indígenas son marginados y Puebla es uno de los estados con menor escolaridad y acceso a servicios médicos.

Además, el sistema de pensiones se encuentra en crisis y los gastos de la entidad se dispararon 195 por ciento en los cinco años recientes.

Moreno Valle aseguró que trabajará sin distingos partidistas, con un gabinete plural y honesto. Anunció una inversión inicial de 7 mil millones de pesos en obras. Se comprometió a eliminar la tenencia y a construir la primera línea de Metrobús.

Héctor Alonso, diputado local por el Panal, aseguró que su partido fue clave para el triunfo de Moreno valle, a quien –dijo– le aportó 180 mil votos. Dejemos la ideología. Seamos pragmáticos. Si no queremos que suceda lo de Egipto tenemos que actuar, porque la gente está desesperada. Aquí la misión era extirpar la corrupción. Por eso nos unimos, expresó.

Fuera del Centro Expositor, un taxista comentó ante el tumulto variopinto: No sabemos qué va a pasar. A ver qué sale de esa mezcla.