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Publica cinco fotos en las que muestra una metamorfosis entre los rostros de ambos

Compara el diario del PC cubano a Barack Obama con su predecesor George W. Bush

Granma acusa a la Casa Blanca de prestar más atención a las presiones de Miami y sus mafiosos

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Simpatizantes del gobierno cubano corean consignas en La Habana contra miembros del grupo femenino opositor Damas de BlancoFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Sábado 26 de febrero de 2011, p. 27

La Habana, 25 de febrero. El diario cubano Granma comparó hoy al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, con su predecesor George W. Bush por el apoyo que mostró a los opositores políticos en la isla, al cumplirse el miércoles pasado un año de la muerte de Orlando Zapata, quien falleció durante una huelga de hambre.

Obama este 23 de febrero fue émulo de su predecesor George W. Bush en el abuso de adjetivos y elogios, como en las imprecisiones o embarques de sus amistades floridianas, señaló Granma, portavoz del gobernante Partido Comunista de Cuba, que publicó además cinco fotografías en las que muestra una metamorfosis entre los rostros de Obama y Bush.

La reputación de la disidencia ha estado tan en tela de juicio, que resulta sorprendente y al mismo tiempo desconcertante que a tales personajes les conceda tal prioridad un presidente tan agobiado por las protestas y crisis domésticas, como con las guerras y revueltas que rodean sus intereses foráneos, apuntó el periódico.

El gobierno del presidente Raúl Castro acusa a los activistas opositores de ser agentes y mercenarios al servicio del gobierno de Estados Unidos, debido al apoyo millonario concedido por Washington a algunos grupos disidentes a lo largo de varias décadas.

Granma recordó que en un cable diplomático estadunidense revelado recientemente por el sitio Wikileaks se describía a la disidencia como un grupo desconectado de la sociedad, que dirige sus mayores esfuerzos a conseguir dinero para alimentar a sus miembros que en esforzarse por llegar a la población. El periódico consideró por ello que la Casa Blanca presta más atención a las presiones de Miami y de sus mafiosos en el Capitolio, que a los diplomáticos.

En un comunicado emitido el miércoles, Obama calificó de desinteresada y trágica la muerte de Zapata, ocurrida el 23 de febrero de 2010, después de 83 días de ayuno, y consideró que su acción galvanizó la atención mundial sobre el continuado maltrato de aquellos retenidos injustamente por las autoridades por defender valerosamente los derechos del pueblo cubano.

Connotación política tardía

La muerte de Zapata no tuvo una connotación política hasta que Washington, la Unión Europea y sus mercenarios no se la concedieron, destacó Granma.

“La ‘valerosa acción’ que el mandatario norteamericano aplaude fue más bien un crimen o un suicidio estimulado hasta por familiares cercanos de la víctima que apostaron más al capital que a la vida de un hijo; sin embargo, ya les han premiado con la condición de refugiados políticos en Estados Unidos”, añadió.

La madre de Zapata, Reina Luisa Tamayo, y otros familiares esperan actualmente el permiso de salida de las autoridades cubanas para trasladarse a Estados Unidos, que ya les ha concedido un visado de entrada. En los últimos meses, la familia había denunciado actos de hostigamiento por parte de las fuerzas de seguridad y partidarios del gobierno cubano.

Zapata era un albañil de 42 años y miembro de un pequeño grupo opositor que, según la disidencia, protestaba con su huelga contra los malos tratos carcelarios y para ser reconocido como preso de conciencia, título que le confirió Amnistía Internacional.

Las autoridades cubanas calificaron su muerte y la posterior ola de condenas internacionales de una campaña mediática contra la isla, y comenzaron al mismo tiempo un inédito diálogo con la Iglesia católica local del que ha resultado la excarcelación de decenas de presos políticos opositores.

En Montevideo, mientras tanto, el secretario general del Partido Comunista de Uruguay, el senador Eduardo Lorier, consideró que las recientes declaraciones del presidente uruguayo José Mujica sobre la situación económica de Cuba rozan en la intervención en asuntos internos de otro país.

El mandatario afirmó que el campeonato de reparto en América Latina lo ganó largamente Cuba porque repartió como nadie, pero también está pagando las consecuencias y ahora no tiene que repartir. El vicecanciller Roberto Conde admitió que Cuba se sorprendió por las afirmaciones del gobernante uruguayo.

Los cables sobre México en WikiLeaks

Sitio especial de La Jornada sobre WikiLeaks