Política
Ver día anteriorLunes 28 de febrero de 2011Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Es preciso aceptar cierta inseguridad necesaria, afirma el obispo

Imposible exigir seguridad total; nadie la tiene, dice el obispo Rivera
 
Periódico La Jornada
Lunes 28 de febrero de 2011, p. 18

El arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, pidió tener confianza, porque a falta de ésta se paraliza toda una sociedad.

En su homilía dominical, en la Catedral Metropolitana, dijo que no se puede exigir seguridad total, porque no la tendremos nunca. Es preciso aceptar cierta inseguridad necesaria. Tenemos que asegurarnos, pero no es posible que nos aseguremos contra todo.

Recordó que el miedo paraliza y hace ineficaz el esfuerzo, pero cuando mejor se trabaja es cuando hay confianza.

La confianza, ilustró el cardenal, es indispensable entre hijos y padres, maridos y esposas, así como en las relaciones sociales; si estamos inquietos, angustiados, nerviosos, es probable que ello ocurra porque nos falta la confianza en Dios.

Al recordar que Cristo nos provee y cuida de todos nuestros pasos, el prelado sostuvo que en lugar de preocuparse hay que ocuparse.

El evangelio da ánimo para trabajar. Cristo no quiere gente ociosa, mientras que la verdadera fe no tiene nada que ver con la ociosidad, con la pasividad, y el cristiano no tiene nada que ver con el fatalista. Dios nos ha dado la capacidad para el trabajo.

En la homilía –en la cual los feligreses oraron por los que gobiernan las naciones para que trabajen por la paz del mundo, para que todos los pueblos puedan vivir y progresar en justicia, paz y libertad–, el cardenal sostuvo que hay que ocuparse, razonablemente, de lo que comeremos, beberemos y vestiremos, pero sin intranquilizarse.

Foto
Integrantes de la Policía Federal realizan una ceremonia por el Día de la Bandera en la CatedralFoto Notimex

Porque la intranquilidad es precisamente lo que paraliza la acción, lo que impide obrar como es debido.

Carrera aseguró que Dios está con nosotros en nuestra vida en cada momento, y que la inquietud por el mañana perjudica el trabajo de hoy. Lo que no condena Cristo, acotó, es la previsión y el ahorro. Tenemos que saber prever razonablemente las cosas y estamos obligados a ahorrar, pero no exijamos una seguridad total, porque no la tendremos nunca. De hecho, dijo, ni en el dinero, poder o placer se puede encontrar la seguridad total; nadie la tiene.

El arzobispo afirmó que hay que saber confiar y sobre todo confiar en Dios, nuestro padre.

Al término de la celebración religiosa se rindieron honores a la bandera mexicana por elementos de la Policía Federal que, junto con la banda de Guerra de las Fuerzas Federales, subieron al atrio donde ofició ayer Rivera Carrera.

Ahí se entonó el Himno Nacional para conmemorar el Día de la Bandera, que en la Catedral Metropolitana se celebra el primer domingo después del 24 de febrero, desde hace seis años.