Phoenix, 2 de marzo. El sheriff del condado de Maricopa, Joe Arpaio, reconoció hoy que usó gas lacrimógeno para detener a 13 indo- cumentados durante un operativo realizado el martes pasado en esta ciudad, en una acción calificada por activistas como excesiva.

El gas se lanzó para forzar a los ocupantes de la casa a salir, indicó Arpaio en un comunicado distribuido este miércoles por su oficina.

Un total de 13 extranjeros ilegales fueron arrestados, y ninguna persona resultó lesionada durante el operativo, indicó el sheriff, quien es conocido en Estados Unidos por su posición antinmigrante, calificada de xenófoba.

Arpaio no mencionó en el comunicado ninguna acción que justificara el uso de gas lacrimógeno, pero calificó de atrincheramiento la actitud de los indocumentados, al decidir resguardarse dentro de la vivienda tras ser sitiados por los agentes del Equipo Especial de Tácticas y Armamento (SWAT, por sus siglas en inglés).

Arpaio está usando el gran palo en cada acción que realiza con inmigrantes, dijo a Notimex Jennifer Allen, directora de la Red de Acción Fronteriza, organización con sede en Tucson, que trabaja en la defensa de los derechos de los indocumentados en Arizona.

El uso de gas para arrestar a personas que no traen documentación migratoria en sus bolsillos constituye un uso excesivo de fuerza, aseguró Allen.

De acuerdo con Arpaio, el incidente se inició luego de que la Oficina del Sheriff inició una investigación para ubicar un vehículo cargado con contrabando humano.

Al detectarse el vehículo sospechoso, agentes del SWAT de la Oficina del Sheriff fueron enviados al lugar, donde lanzaron gas lacrimógeno por las ventanas de la vivienda para forzar a sus ocupantes a salir, agregó.

Explicó que el cabecilla de los contrabandistas que albergaba a los inmigrantes fue detenido al tratar de huir de la vivienda, donde luego de una inspección se localizaron una pistola nueve milímetros y varias balas.

Las detenciones de ayer demuestran que el problema de contrabando de drogas y de extranjeros ilegales parece fuera de control y continúa dentro del condado Maricopa, señaló Arpaio.

Adelantó que pronto se realizará una operación masiva dirigida a poner fin a la invasión de drogas y de extranjeros ilegales en el valle, incluyendo a Phoenix.