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El sábado abrirán la exposición Maistro: ¿y si no puede? ¡se lo invento!

Recuperan 36 de los oficios más populares de la identidad mexicana

Se evocan voces cada día más escasas y estructuras musicales avasalladas por la tecnología

Foto
Merenguero y algodonero, dos oficios populares de los años 60 del siglo pasadoFoto MAM/ M. Chávez Emilio
 
Periódico La Jornada
Jueves 24 de marzo de 2011, p. a10

Al recrear una calle de la ciudad de México, se traslada al espectador a los años 60 del siglo pasado.

Esa cotidianidad del paisaje citadino y de sus personajes cobra vida en la muestra Maistro: ¿y si no puede? ¡se lo invento! Un día en los oficios de la calle, que reúne una serie de objetos y fotogra-fías alusivos a trabajos populares que forman parte de la identidad mexicana, manifestó el museógrafo David Israel Pérez Aznar.

En la exposición, que será inaugurada este sábado 26 en el Museo de Arte Popular (MAP), es ineludible evocar los pregones de ¡hay merengues! o ¡aquí sus tamales!, o bien, recordar imágenes como la del puesto de periódicos o la accesoria donde labora el peluquero tradicional.

Ilusión temática

El recorrido pretende ser una caminata por la calle de alguna populosa colonia, el cual destaca las actividades que realizan personajes como el barrendero, el vendedor de jugos, la señora de los tamales, el panadero en su bicicleta y la panadería que exhibe tras su cristales chilindrinas, conchas y azucarados bizcochos.

El discurso museográfico permite al visitante estar en presencia de una ilusión temática de los oficios tradicionales y de algunos otros que todavía siguen presentes.

El cartero, el afilador, el ropavejero, el taquero, el estudio fotográfico, el taller mecánico, el carrito de los camotes, el sastre, el zapatero y la pulquería dan vida a estos artesanos urbanos.

También se muestra un taxi cocodrilo, vehículo que en ese imaginario llevará al espectador a la Alameda Central, donde resaltará el colorido del paisaje citadino.

Los merengues, algodones y helados, así como los puestos de dulces tradicionales aparecen junto al vendedor de pepitas para reavivar la memoria de un pueblo que se reconoce luchón y nostálgico.

Se evocan voces cada día más escasas, ecos y sonidos espectaculares, además de estructuras musicales que han perdido terreno ante el avance de la tecnología, dijo Walther Boelsterly director del MAP.

Alrededor de 36 oficios fueron recuperados para esta exposición tras adentrarse en colonias como Tepito, Guerrero, Peralvillo o el mismo Centro Histórico, dijo Pérez Aznar.

Esta muestra es un homenaje a estos personajes que no son tan exitosos como antaño, debido al avance tecnológico que ha abatido sus oficios hasta casi desaparecerlos.

En conferencia de prensa, Boelsterly estuvo acompañado por Epifanio Leyva, El Pifas, como es conocido en su pulquería, además de José Jerónimo, quien elabora sus propios merengues y del escritor Armando Ramírez, asesor de la muestra, entre otros invitados.

Durante la presentación de la exposición, El Pifas explicó la preparación de los curados y su resurgimiento en el gusto de los jóvenes, mientras el merenguero habló sobre la elaboración de las duquesas y los gaznates.

La muestra, que será inaugurada este sábado las 12 horas en el Museo de Arte Popular, concluirá el 5 de junio en el recinto que se ubica en la calle Revillagigedo número 11, esquina con Independencia, Centro Histórico.