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La puesta en escena gira en torno a la obra de Albert Camus

El malentendido muestra, sin enjuiciar, nuestro lado oscuro

Encantan a las protagonistas los siniestros personajes que encarnan

 
Periódico La Jornada
Sábado 4 de junio de 2011, p. 5

El laboratorio de experimentación de Dios es un escenario en blanco donde se desarrolla de manera metafórica la tétrica historia de cinco personajes que confluyen en un sórdido y devastado lugar en la Europa de la posguerra.

La puesta en escena El malentendido gira en torno a la obra escrita por Albert Camus (Argelia 1913-1960) a propósito de una nota periodística, en la cual se exhibe el sin sentido de la vida, el lado oscuro del ser humano y la petrificación de las emociones.

La costumbre de matar empieza con el segundo crimen, consigna la mujer quien da vida al personaje central en la luminosa caja blanca, en donde sobresalen como recursos escénicos sólo una mesa, sillas, sábanas y tazas.

En entrevista, las actrices Ana Ofelia Murguía, Emma Dib Rodrigo Vázquez y Érika de la Llave manifestaron su placer por encarnar a los siniestros personajes creados por Camus y presentarlos en breve temporada en la sede de la Compañía Nacional de Teatro (CNT) en el barrio coyocanense de Santa Catarina.

El montaje fue estrenado en junio de 1944 –cuando los diarios informaban sobre la batalla de Cherburgo y la ofensiva soviética en la región de Vitebsk– y ubica a los personajes al interior de un hostal.

Este lugar para alojar a los huéspedes fue ideado desde esa época por Gabriel Pascal como una especie de Bed and breakfast (cama y desayuno) donde prevalece la asepsia y las emociones se han petrificado.

El Malentendido es una obra, dijo Murguía, que en lugar de enjuiciar observa el comportamiento de personajes lacónicos, habitantes de una Europa devastada física y anímicamente por la guerra y cuya atmósfera es la excusa para cometer atrocidades.

En la historia de Camus se plantea el alejamiento de un hombre durante 20 años, lapso tras el cual regresa al hogar paterno ya casado para compartir la fortuna y felicidad con su madre y su hermana, quienes atienden un hostal y realizan acciones inaceptables con la intención de reunir dinero y salir de ese pequeño poblado.

Ana Ofelia Murguía explicó estos cinco personajes son misteriosos, pero además del hijo pródigo, que regresa ya casado, destaca el mayordomo, quien no habla, sólo se dedica a observar a todos. Este mozo, agregó, bien podría ser Dios, el destino o alguna otra fuerza sobrenatural.

Foto
Ana Ofelia Murguía, Éricka de la Llave y Emma DibFoto Cristina Rodríguez

En tanto, prosiguió, los personajes de la madre y la hija figuran porque son quienes reciben en el hotel a aquellos que visitan esos parajes y a las personas que tienen dinero les ofrecen un tecito para dormirlos y después arrojarlos en la presa.

La obra de Camus, intervino Emma Dib Rodrigo Vázquez, presenta a una familia en específico y el escritor realiza un planteamiento filosófico del existencialismo, del sin sentido de la vida y del cuestionamiento teológico, así como del reconocimiento o desconocimiento de Dios y la relación entre los seres humanos.

Filosofía sin discurso

No puede negarse el sesgo filosófico, refiere la actriz, pero también ha sido un gran trabajo presentarlo a los espectadores en una propuesta escénica que no parezca un discurso.

En el montaje predomina el azar, agregó Murguía, y no hacer caso a la intuición puede ser letal, se debe salir de ese lugar para salvarse. No obstante, actualmente vivimos en una época más terrible, dominada por la violencia y la muerte.

El montaje dirigido por Marta Verduzco, con música creada ex profeso por Joaquín Gutiérrez Heras (con melodías para cello y arpa) y con el diseño de vestuario de Estela Fagoaga recrean situaciones donde el juego de valores y las relaciones de pareja también forman parte de la historia.

En la obra también actúa Farnesio de Bernal y se presenta en el contexto del 50 aniversario luctuoso de Albert Camus, quien obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1957.

El Malentendido se presentará a partir de este viernes 3 de junio a las 20 horas y continúa con dobles funciones el sábado 4 (13 y 19 horas) y el domingo 5 (13 y 18 horas). Prosigue temporada miércoles, jueves y viernes a las 20 horas, y sábado y domingo a las 18 horas.

La entrada es gratuita con previa reservación a la Sala de la Casa de la Compañía Nacional de Teatro, Francisco Sosa 159, Barrio de Santa Catarina, Coyoacán. Informes: 56 58 41 08.