Portada

Presentación

Bazar de asombros
Hugo Gutiérrez Vega

Bitácora Bifronte
Jair Cortés

Monólogos Compartidos
Francisco Torres Córdova

Entre el corrido y
la lírica popular
Adriana Cortés Koloffon
entrevista con Margit Frenk

Un muralista en la UAEM
Óscar Aguilar

Borges y el jueves
que fue sábado
Ricardo Bada

Con Borges en Ginebra
Esther Andradi

Borges en catorce versos
Ricardo Yáñez

Los halcones, cuatro décadas
Orlando Ortiz

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Columnas:
Galería
Rodolfo Alonso
Las Rayas de la Cebra
Verónica Murguía
Bemol Sostenido
Alonso Arreola
Cinexcusas
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La Otra Escena
Miguel Ángel Quemain
Cabezalcubo
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“Creo que siempre voy a regresar a Ginebra. Aun después de la muerte del cuerpo”: así lo confesó Jorge Luis Borges en Atlas y, como bien se sabe, la premonición fue cumplida, pues los restos del autor de El libro de arena reposan en la capital suiza desde hace veinticinco años, que se cumplirán pasado mañana, 14 de junio. Los textos de Esther Andradi, Ricardo Bada y Ricardo Yáñez conmemoran esta fecha y celebran la inmortalidad –“ésa sí que es una amenaza”, dijo Borges alguna vez– de ese escritor y lector universal, sin cuya obra la literatura toda, no sólo la escrita en español, estaría definitivamente incompleta. Publicamos además una entrevista con la investigadora y académica universitaria Margit Frenk, así como un ensayo de Orlando Ortiz sobre la masacre que el 10 de junio de 1971 perpetrara el gobierno federal en contra de los estudiantes que, por primera vez desde el ‘68 en Tlatelolco, volvían a salir a las calles a manifestarse.