Sociedad y Justicia
Ver día anteriorMiércoles 27 de julio de 2011Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

La SEP debe decir cómo evaluó a los más aptos para la docencia

El examen nacional sólo sirve para legitimar la ACE, opinan especialistas
 
Periódico La Jornada
Miércoles 27 de julio de 2011, p. 41

El argumento de la Secretaría de Educación Pública (SEP) de que con el examen nacional para obtener una plaza docente se seleccionan a los mejores maestros cae por sí solo, porque no sólo se ha evidenciado que con apenas 25 preguntas correctas se puede acceder a un puesto, sino que la dependencia tendría que demostrar en qué son los más sobresalientes y comprobar que quienes entraron por este mecanismo –y no por otras vías– son los educadores con las mayores habilidades para la docencia, expresaron especialistas.

Por otra parte, al no evaluar habilidades docentes, la prueba no sirve para mejorar la capacidad de los mentores, la planeación ni la enseñanza en las aulas, de tal modo que sólo legitima el acuerdo político entre el titular del Ejecutivo y la lideresa magisterial, Elba Esther Gordillo, en torno a la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE), advirtió la profesora-investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM)-Cuajimalpa, Claudia Santizo.

En entrevista, expresó que más allá de cuestiones sindicales y de que pudiera existir un pacto con Gordillo para no exhibir a los docentes que reprueban, las autoridades del ramo no informan cuántos se encuentran en esa situación, porque tendrían que proveer una solución al problema. Sin embargo, no existe esa respuesta de la SEP.

Este examen no es un instrumento de política educativa para mejorar la enseñanza, afirmó al expresar sus dudas de que dicha evaluación sirva siquiera para saber qué tipo de capacitación requieren los mentores. Si los aspirantes responden 25 preguntas correctas de normatividad y aspectos situacionales, qué idea se puede tener de lo que necesitan aprender o dominar antes de enfrentarse a un grupo.

De tal forma que la insistencia de la SEP de que con esta evaluación se selecciona a los mejores del país, cae por sí misma, porque para empezar tendría que decir en qué son mejores.

Por su parte, la integrante del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Catalina Inclán, manifestó que apostar sólo al examen para identificar a los docentes con el perfil adecuado, además de ser una limitante se presta a contradicciones, injusticias y sinsentidos.

Esto, en razón de que la prueba da el derecho de ingreso para siempre y no hay nada después que permita demostrar que ese profesor mantiene el nivel con el que inició y, por otro lado, se someta a mecanismos para renovar sus conocimientos.

La SEP tampoco ha realizado el seguimiento de los maestros que entraron a partir de este sistema: ¿son mejores que los que ingresaron por otras vías?, ¿demuestran mejores niveles? En realidad no se sabe qué ha pasado con ellos.

En el caso de los docentes pueden aspirar a una plaza con 25 preguntas correctas. Si los que obtienen ese número de respuestas correctas provienen de campos cercanos a la docencia, me preocuparía mucho porque estamos formando profesionales que no tienen los elementos mínimos.

Por último, dijo que la rendición de cuentas de la SEP en relación con esa evaluación es parcial, cuando quienes idean esto no dan la cara, además de que tiene una dimensión política que, todos sabemos, existe en el terreno de lo educativo.