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Lo que busca es justificar el uso exacerbado de la fuerza, advierten

Critican organizaciones civiles que el Presidente reconozca el poder del narco
 
Periódico La Jornada
Viernes 23 de septiembre de 2011, p. 7

Las declaraciones hechas por el presidente Felipe Calderón ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), en el sentido de que los grupos de narcotraficantes tienen más poder que muchos gobiernos y han matado más gente que todas las dictaduras juntas, buscan justificar el uso exacerbado de la fuerza por parte de las autoridades en el contexto de la guerra contra el crimen, señalaron integrantes de organizaciones civiles.

Silvano Cantú, miembro de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, afirmó que comparar al narco con los regímenes dictatoriales está fuera de lugar y el único objetivo de ello es reforzar la construcción de la imagen del enemigo interno.

Al advertir que los delincuentes representan una amenaza para los poderes establecidos, Calderón trata de justificar una política donde se privilegia el uso exacerbado de la fuerza y así inicia una suerte de carrera diabólica por ver quién tiene más poder de fuego. Lo único que podemos esperar de ello es que el ciclo de violencia aumente y quien pierde más es la población civil, lamentó.

Las declaraciones del mandatario federal demuestran, por otra parte, que al Estado mexicano le falta una verdadera visión para garantizarle a todos sus ciudadanos el derecho a la seguridad, independientemente de qué tan poderoso sea el factor que lo pone en peligro.

El de Calderón es un comentario desafortunado y sin sustento jurídico, porque no reconoce su obligación internacional de proteger la vida de las personas, dijo Cantú.

Adrián Ramírez, presidente de la Liga Mexicana en Defensa de los Derechos Humanos, indicó por su parte que al reconocer el poder y la influencia de los grupos del crimen organizado, el mandatario admite que la magnitud del problema ha sobrepasado las capacidades de su gobierno.

Hacer este reconocimiento implica decir que se ha rebasado ya a los estados, y pese a que lo niegue, la situación es muy grave y está fuera del control del gobierno, aseveró.

Tomando en cuenta que el narcotráfico es una empresa, compuesta por factores económicos muy importantes en varios países, es necesario atacarlo de forma integral, y uno de los puntos más sensibles sería acabar con el secreto bancario, ya que ese es el germen que permite el manejo de grandes recursos ilícitos en los sistemas financieros, apuntó.