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El petróleo y el sexenio de la mentira
N

o es la primera vez, ni mucho menos. Ya Pemex había inventado reservas por montón. Una de las veces más recientes fue en la comparecencia del director general ante la Comisión de Energía del Senado, el 25 de mayo de este año. Aparecieron, para la región Norte, donde está Chicontepec, reservas del doble y del triple de las que oficialmente se tenían. Y, como de costumbre, no eran probadas, más que las que ya se tenían publicadas.

Ahora tenemos un anuncio de un gran hallazgo de al menos 400 mil millones de pies cúbicos de gas, en aguas profundas a 113 kilómetros de Coatzacoalcos. Aparecieron de milagro, porque en los reportes oficiales no había nada de eso.

En el cuadro oficial de reservas de hidrocarburos al primero de enero de 2011, las regiones que tienen reservas, sean éstas probadas (las únicas reales), probables o posibles, son: Marina Noreste, Marina Suroeste, Norte y Sur. Pero nada de aguas profundas, es público que en ellas no ha habido reservas. En los reportes trimestrales, las regiones siguen siendo las mencionadas, y en el más reciente, que llega hasta el 30 de septiembre, tampoco se menciona ningún caso en aguas profundas. ¿Cómo van a aparecer de repente 400 mil millones de pies cúbicos de gas? Y mencionan un solo pozo, el Nen 1. Ya sabemos que se necesitan varios pozos productivos para delimitar un campo y poderlo evaluar. La información anterior es que de todos los pozos en aguas profundas, sólo uno podía producir gas y ninguno generaba petróleo. Y de repente aparece de milagro esta cantidad, con un solo pozo.

La realidad es que, entre la quema de gas y la falta de producción integral y racional del mismo gas natural, nuestras importaciones no sólo siguen sino aumentan. En 2010 se importaron 217 billones de pies cúbicos, y en 2011 se estiman 335 billones. Aumentó la importación de gas en más de 50 por ciento en un año.

Las mentiras no son exclusivas de Pemex, ha habido otros casos. Y las de Pemex tampoco han sido sólo en supuestas o reales reservas. Por ejemplo, la genialidad de importar crudo superligero, con el pretexto de usarlo en las refinerías. Cuando que ya lo exportamos en cantidades crecientes. Lo criminal es exportarlo, en vez de usarlo en refinerías y en complejos petroquímicos. Pero al no haber un negocio para ellos, ya las refinerías no les importan.

Las mentiras vienen, por lo menos desde la campaña electoral del actual gobierno. Y ya vimos que en tiempos del PRI también las hubo, como con el gas que iba a exportarse a Estados Unidos.

Si fuera cierto lo de las mencionadas cantidades de gas, ¿por qué los funcionarios de Pemex entregaron ya yacimientos maduros, casi agotados? ¿Y por qué quieren entregar otros más en condiciones similares, pero ahora ya no por 25 sino por 30 años?

Si fuera cierto, ¿por qué está asignado para este año, para Chicontepec, un presupuesto de más de 20 mil millones de pesos, con una producción del 2 por ciento nacional, 50 mil barriles diarios?

¿Y por qué se asignan 56 mil millones de pesos para este mismo año, a Cantarell, que produce poco más de una quinta parte de 2004, concretamente 416 mil barriles diarios? Menos mal que Chicontepec, pero...

El presupuesto para delta del Grijalva, en tierra, cerca de la costa de Tabasco, es para este mismo año de 6 mil millones de pesos, menos de la tercera parte que Chicontepec. Pero aumentó su producción al triple en seis años, tanto en crudo como en gas. Y su producción de crudo es de 150 mil barriles diarios, el triple que en Chicontepec. Con un tercio de presupuesto, se triplica la producción del delta y se produce el triple de crudo que en Chicontepec.

El presupuesto de litoral de Tabasco fue de 9 mil millones de pesos, menos de la mitad que en Chicontepec. Su producción de gas aumentó siete veces en ocho años. En ese mismo lapso su producción de crudo aumentó cinco veces. Esta última producción fue de 276 mil barriles diarios, más de cinco veces la de Chicontepec, con menos de la mitad de su presupuesto.

Aunque no es un derroche como el de Chicontepec, el de Cantarell, 56 mil millones, nos da una producción decreciente, y ya produce menos que la suma de litoral de Tabasco y delta del Grijalva; esta última suma es de 276 + 150 = 426 miles de barriles diarios. Diez mil barriles más que la producción de Cantarell, y su presupuesto sumado es de 15 mil millones de pesos, poco más de una quinta parte del presupuesto de Cantarell. Y no estamos contando la producción de gas de las dos áreas productivas, varias veces superior a la de Cantarell.

Volvemos a lo que debían hacer si fuera real esa cantidad de gas descubierto. No derrochar el dinero en proyectos con contratistas que perforan cientos de pozos, en los términos señalados. Y sin un provecho proporcional a su producción. Destinar más presupuesto a las áreas productivas, y menos dinero a las menos productivas. No son reales esas millonadas de gas descubierto, pero de todos modos esta alternativa es la mejor.