Economía
Ver día anteriorSábado 10 de diciembre de 2011Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 

Rechaza Merkel que el mecanismo de estabilidad reciba fondos del BCE; eurobono, pendiente

Acuerda la eurozona, sin Reino Unido, sancionar déficit fiscales

Gana propuesta de Berlín y Francia de fijar un máximo de 3%; celebran mercados con alzas

Foto
El primer ministro británico, David Cameron (centro), mira a la canciller alemana Ángela Merkel (izquierda) ayer durante la reunión de la Unión Europea en BruselasFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Sábado 10 de diciembre de 2011, p. 24

Bruselas, 9 de diciembre. Europa llegó a un acuerdo histórico este viernes para la redacción de un nuevo tratado que profundice la integración económica de la zona euro, pero Reino Unido, la tercera economía de la región, rechazó sumarse a los otros 26 países de la Unión Europea (UE) en una unión fiscal y quedó aislado.

Un total de 26 de los 27 jefes de Estado y de gobierno de la UE acordaron un régimen de disciplina presupuestaria más estricto, con sanciones automáticas para aquellos que incumplan sus metas de déficits en el bloque de la moneda común.

Acuciada por la crisis de deuda y el acoso de los mercados, la eurozona secundó la propuesta de Berlín y París para endurecer la disciplina fiscal que contempla la imposición de sanciones a los infractores que superen el techo de déficit superior a 3 por ciento del producto interno bruto (PIB) y un techo máximo de deuda pública de 60 por ciento.

Además, los 27 socios del bloque, con excepción del Reino Unido, deben colocar sus déficit estructurales anuales por debajo de 0.5 por ciento de PIB, la regla de oro para Berlín, que además estará fijada en las constituciones de cada socio. Por otra parte, se incluyen mecanismos de corrección automáticos en casos de desviación de los objetivos de disciplina.

Ello se hará mediante un acuerdo intergubernamental, que involucre a los 17 países del euro, así como al resto de la UE que quieran sumarse, pero no a través de una reforma de los tratados que exige la unanimidad de los 27 miembros del bloque, debido a la oposición de Gran Bretaña.

La canciller alemana Ángela Merkel afirmó que se trata de un “importante avance a una unión de estabilidad. Todos queremos un euro más estable y más fuerte. Hemos dado pasos decisivos para ello, señaló en conferencia de prensa al final de la cumbre, que se presentaba como decisiva para establecer la salida a la crisis.

Por su parte, el primer ministro británico, David Cameron, defendió su rechazo a modificar los tratados de la unión comunitaria, al señalar que lo que se propuso en el pacto no es acorde con los intereses de Reino Unido.

Como condición para aprobar el pacto para una mayor disciplina fiscal, Cameron reclamó reglas especiales para el centro financiera de Gran Bretaña (que forma parte de la Unión Europea, pero no de la zona euro), exigencia que fue rechazada por el resto de los países.

La fisura, que podría profundizar la división permanente entre Londres y Europa, ocurre 20 años después del día en que los líderes europeos acordaron en una cumbre en Maastricht crear la moneda única, con el Reino Unido aparte.

Los países que forman parte de la zona euro son: Alemania, Austria, Bélgica, Chipre, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Holanda, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Malta y Portugal.

Después de 10 horas de negociaciones en el Consejo Europeo reunido en Bruselas, los 17 socios del euro más nueve de los 10 que no integran el bloque monetario resolvieron negociar un nuevo tratado intergubernamental anexo al tratado de la UE.

Los otros nueve países del bloque que no forman parte de la zona euro podrán suscribir también los acuerdos, pero tendrán que consultar con sus parlamentos. Se trata de Bulgaria, República Checa, Dinamarca, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumania y Suecia.

El acuerdo protegerá al euro a mediano y largo plazos, aseguró el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy.

Los mandatarios acordaron reforzar el Fondo Monetario Internacional (FMI) con cerca de 200 mil millones de euros, en forma de préstamos bilaterales, para que pueda socorrer a los países amenazados de la eurozona. También decidieron adelantar un año, a julio de 2012, la puesta en marcha del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), que durante un año funcionará junto con el fondo de rescate europeo (FEEF).

Sin embargo, Merkel rechazó convertir a este mecanismo de rescate permanente en una institución crediticia que pueda recibir fondos del Banco Central Europeo (BCE). El debate para la creación de eurobonos, una medida de solidaridad que pedían varias de las economías más amenazadas, también quedó postergado.

Los europeos no lograron un compromiso directo del BCE para que intervenga más en los mercados de deuda, comprando bonos emitidos por los países amenazados. De todas maneras, el jefe del BCE, Mario Draghi, celebró el muy buen resultado para la eurozona, que logró la base de un pacto fiscal.

Señal de progreso: Washington

En Washington, el gobierno de Estados Unidos señaló que el pacto alcanzado por la eurozona para paliar los efectos de la crisis de deuda y buscar una salida al problema financiero es una señal de progreso, si bien advirtió que aún deben tomarse más medidas para calmar los mercados internacionales.

Creemos que las señales de progreso son buenas, afirmó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney. Esta es una señal de progreso, pero obviamente debe hacerse más, alertó. Destacó que el presidente Barack Obama está consciente de las dificultades y los asuntos implicados en el intento por solucionar la crisis de deuda europea, pero insta a los líderes del viejo continente a continuar adelante y terminar con su trabajo.

La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, dio la bienvenida al acuerdo de los países europeos para vincular más estrechamente las políticas fiscales e instó a otros a hacer su parte para ayudar a aliviar las tensiones generadas por la crisis de deuda de la zona euro.

Elogió el acuerdo alcanzado por los 17 miembros de la zona euro y otros nueve países para endurecer las normas fiscales y evitar así una repetición de la actual crisis. Aprecio esta demostración de liderazgo desde Europa y estoy esperanzada en que otros también harán su parte, dijo Lagarde en un comunicado.

Los mercados celebraron el acuerdo con notables alzas en las bolsas de valores, los precios de las materias primas, como el petróleo y los metales, mientras monedas como el euro y el peso ganaron valor frente al dólar.

La bolsa de Nueva York cerró con fuertes ganancias, impulsado por el acuerdo europeo de unión de estabilidad presupuestaria y por los datos positivos sobre la economía estadunidense: el Dow Jones subió 1.55 por ciento, el Nasdaq 1.94 y el Standard & Poor’s 500 1.69 por ciento.

En América Latina, la Bolsa Mexicana de Valores avanzó 1.60 por ciento y llegó a 37 mil 227.21 unidades; la de Sao Paulo subió 1.36 por ciento, Santiago 1.03, Lima perdió 0.60 por ciento y la plaza de Argentina permaneció cerrada por ser festivo.

Las principales bolsas europeas cerraron con notables aumentos, Londres ganó 0.83 por ciento, París 2.48, Fráncfort 1.91, Madrid 2.23 y Milán fue la que más avanzó con 3.37 por ciento.

El petróleo Brent de Londres subió 51 centavos a 108.62 dólares por barril; el estadunidense West Texas Intermediate (WTI) ganó 1.07 dólares, a 99.41 dólares, mientras la mezcla mexicana sumó 36 centavos, al cerrar en 105.28 dólares por barril.

El euro avanzó frente al dólar, a 1.3370, tras subir hasta 1.3433 luego que se informó que el Banco Central de China planea crear un vehículo para administrar fondos de inversión por 300 mil millones de dólares en Estados Unidos y Europa. En la semana, el euro perdió 0.5 por ciento contra el dólar.

Por su parte, el peso mexicano cerró el viernes con una apreciación de 0.51 por ciento frente al billete verde, al cotizarse en 13.63, frente a los 13.70 del cierre del jueves en ventanillas bancarias, según información de Banamex.

Presión inflacionaria en México

La incertidumbre en la zona del euro exacerba el riesgo de inflación en México por una moneda local debilitada, advirtió ayer el subgobernador del Banco de México, Manuel Sánchez.

En un discurso ante la Cámara de Comercio Estados Unidos-México en Los Ángeles, California, Sánchez dijo que el principal riesgo inflacionario viene del peso, que la semana pasada tocó su nivel más bajo en dos años y medio, golpeado por la crisis de deuda en Europa.