Por falta de dinero se dejó de realizar el Registro Histopatológico de Neoplasias Malignas. El último con los datos nacionales sobre la prevalencia de los diferentes tipos de cáncer maligno es de 2003, señaló Miguel Ángel Jiménez, jefe del servicio de Urología del Instituto Nacional de Cancerología.

Ante la necesidad de contar con información sobre los tumores malignos, la Sociedad Mexicana de Oncología ha tratado de recopilar información de cada uno, pero no alcanzan a ser exhaustivos. En el caso del cáncer de próstata se han obtenido cifras que tampoco son concluyentes, a diferencia de lo que ocurre con los tumores de mama y cérvico-uterino en la mujer, cuyo registro forma parte de las acciones de los programas específicos de prevención, detección, diagnóstico y tratamiento de dichos males. Ambos prioritarios en el sistema nacional de salud.

Mayra Galindo, presidenta de la Asociación Mexicana de Lucha contra el Cáncer, señaló que aunque desde septiembre pasado el gobierno federal anunció la inclusión del tumor prostático en la cobertura del Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos del Seguro Popular aún no es una realidad.

Los pacientes no han podido acceder a los tratamientos gratuitos, entre otras razones porque está en proceso la certificación de los hospitales donde serán atendidos. Al respecto, Jiménez comentó que recientemente se elaboraron las guías de manejo clínico y los análisis de costos. Estimó que la prestación para los hombres sin acceso a la seguridad social podría iniciar en dos o tres meses.