Washington, 1° de febrero. El director del servicio de inteligencia de Estados Unidos, James Clapper, afirmó este miércoles que Irán está dispuesto a cometer ataques en territorio estadunidense si el gobierno de Teherán se siente amenazado por Washington y sus aliados.

En este contexto, el diario The Independent informó que la jerarquía militar y las fuerzas de seguridad israelíes temen las repercusiones que pueda tener en su territorio un ataque prematuro contra Irán, debido a que, según fuentes cercanas a la cúpula israelí, el primer ministro Benjamin Netanyahu y el ministro de Defensa Ehud Barak se inclinan hacia la opción militar contra Teherán.

Clapper aseguró ante una audiencia del Comité de Inteligencia del Senado que Irán aún está indeciso sobre la fabricación de una bomba atómica, pese a contar con capacidad de hacerlo. Añadió que es más probable que Irán responda con un ataque a Estados Unidos.

El pasado 31 de diciembre, el presidente estadunidense, Barack Obama, firmó un proyecto de ley que contempla provisiones sobre nuevas sanciones contra Irán, dirigidas contra las instituciones financieras extranjeras que hacen negocios con el banco central iraní, principal conductor de sus ingresos petroleros. La decisión provocó que Teherán amenazara con bloquear el estrecho de Ormuz, una de las rutas más importantes para el transporte de petróleo en el mundo.

De su lado, el teniente general israelí Amnon Lipkin-Shahak, funcionario cercano a Barak, afirmó en declaraciones a The Independent que dentro del gobierno israelí no se ha analizado mucho lo que ocurriría al día siguiente de un ataque militar israelí contra Irán.

Señaló que Teherán y sus aliados paramilitares, como Hezbollah, podrían efectuar una violenta represalia y subrayó que el presidente iraní, Mahmud Ajmadineyad, se beneficiaría del ataque al quedar como un héroe ante los ojos de su pueblo.

Añadió que si Irán contara con arsenales nucleares seguramente desestabilizaría la región en caso de un choque con Israel, y agregó que el conjunto de las fuerzas castrenses y de seguridad israelíes no están de acuerdo con emprender una agresión militar contra Irán.