El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, advirtió que ya necesitamos ensayar alguna otra cosa en el combate contra el narcotráfico que se libra en el continente, porque no estamos cerca de ganar esta guerra: ¿Cuántas cosas más tienen que pasar para que esto termine?, ¿cuántos presos más?, ¿cuánta droga hay que confiscar?, preguntó.

Dijo que es necesario buscar otras estrategias que pongan más acento en la demanda de los países consumidores de drogas y en el ataque a los secretos bancarios y al dinero oculto que fluye.

En la conferencia El orden interamericano frente a los retos de la globalización: viejos y nuevos actores del orden mundial, en la Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco, Insulza señaló: Tenemos muchos prisioneros en el continente americano a raíz de esta guerra contra el crimen organizado y también confiscamos mucha riqueza, pero por algún motivo no parece que estemos teniendo tanto éxito”. Refirió que la guerra contra el narco la agarró el presidente Nixon al inicio de la década de los 70”. Y preguntó si luego de más de 40 años de este combate el balance es un fracaso.

“Para usar la palabra fracaso adecuadamente, uno tiene que entender que en 2010, según estimaciones de organismos internacionales, se confiscó casi la mitad de los embarques de cocaína que había en el mundo, y de los 3 millones 600 mil americanos –hablo de las Américas– que están en la cárcel, un tercio está por drogas.” Esto es, más de un millón 200 mil ciudadanos en este continente están recluidos a causa de los estupefacientes.

Por otra parte, al participar en el 80 Periodo del Comité Jurídico Interamericano, Insulza indicó que a pesar de la amenaza que representa el crimen organizado para las democracias, nosotros confiamos en que la elección presidencial en México se llevará a cabo de manera normal.

El ex secretario de Gobernación Fernando Gómez Mont consideró que no hay incentivos para que organizaciones criminales bloqueen las elecciones. Una cosa es que traten de influir bajo mecanismos de corrupción, pero que traten de bloquear el proceso, no lo creo; el costo para ellos sería el más alto de todas las locuras que están haciendo.

(Con información de Ciro Pérez Silva)