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Lejos de rectificar, el escritor leyó en televisión su poema completo mirando a la cámara

Günter Grass redobla su condena a la política de Israel frente a Irán

El Nobel de Literatura alemán alerta contra la unificación de opinión y la negación a ocuparse del contenido y las preguntas que plantea en su texto Lo que hay que decir

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Günter Grass el 12 de marzo de 1993 durante una entrevista con La JornadaFoto Carlos Cisneros
 
Periódico La Jornada
Viernes 6 de abril de 2012, p. 5

Berlín/Jerusalén, 5 de abril. El premio Nobel de Literatura alemán Günter Grass (1927) redobló su condena a la política de Israel contra Irán, en medio de una ola de críticas a las que hoy se sumó el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

El autor de 84 años había calificado a Israel de amenaza a la paz mundial en un poema (Lo que hay que decir) publicado este miércoles. Comentaristas y políticos alemanes e israelíes respondieron calificando el texto de antisemita, desproporcionado y agresivo.

Lejos de rectificar, Grass salió a defenderse hoy en diversos medios e incluso leyó en televisión el poema completo, mirando directamente a cámara en varios pasajes.

Si Israel ataca instalaciones atómicas de Irán, supuestamente con las llamadas bombas normales, convencionales, podría desencadenar la Tercera Guerra Mundial, advirtió en una entrevista con Dpa.

La situación explosiva en Medio Oriente podría volverse incontrolable si Israel decide un ataque preventivo contra Irán, señaló.

Como ya denunciaba en su poema, el autor insistió en que hasta ahora no se ha probado que Irán posea la bomba atómica o un sistema de misiles de largo alcance, y pidió que tanto Irán como Israel sometan sus programas nucleares a un control internacional.

El autor también arremetió contra el hecho de que justo Alemania, pese a su dramático pasado, sea hoy el tercer exportador de armas del mundo: Es una vergüenza, expresó.

Apoyo del mundo de la cultura

En otra entrevista con la radio NDR, Günter Grass lamentó la reacción que produjo el poema. Hay una tendencia generalizada a no ocuparse del contenido para lanzar una campaña contra mí y asegurar que mi prestigio quedó dañado para siempre.

Por eso alertó contra la unificación de la opinión en un país democrático y contra la negación a ocuparse del contenido y las preguntas que plantea su poema.

Pero las críticas siguieron arreciando hoy. La vergonzosa equiparación de Israel con Irán, un régimen que niega el Holocausto y con ello amenaza con eliminar a Israel, dice poco sobre Israel, pero mucho sobre el señor Grass, señaló hoy la oficina de Netanyahu.

Es Irán, y no Israel, quien supone una amenaza para la paz y la seguridad en el mundo, continúa el escrito. Es Irán, y no Israel, quien amenaza a otros países con la extinción. Es Irán, y no Israel, quien apoya a organizaciones terroristas que disparan misiles contra civiles. Es Irán, y no Israel, quien permite la lapidación de mujeres y que se cuelgue a homosexuales, así como reprime brutalmente a su pueblo.

Netanyahu recordó que Grass guardó silencio durante seis décadas sobre su pertenencia a las Waffen-SS nazis. Por eso, continuó, no sorprende que declare que el único Estado judío del mundo es el mayor peligro para la paz mundial y que le niegue medios para defenderse.

También desde Israel, el escritor Elie Wiesel, superviviente del Holocausto y premio Nobel de la Paz, mostró sorpresa por la actitud de Grass.

Simplemente no lo entiendo y no lo puedo comprender. ¿Qué ha pasado? ¿Ha vuelto de repente el viejo alemán y ha levantado la cabeza?, escribió hoy en el diario israelí Jediot Achronot.

Esperaba que Grass, en vista de su pesado y problemático pasado, mostrara un poco más de prudencia y humildad.

Las pocas voces de apoyo para el escritor llegaron del mundo de la cultura. Estamos a su lado como escritor, aunque no nos pronunciamos sobre su poema, dijo a Dpa su editor en Israel, Ziv Lewis.

También el presidente de la Academia de las Artes en Berlín, Klaus Staeck, consideró que en un país libre debe ser posible lanzar duras críticas entre amigos, sin necesidad de despertar automáticamente la sospecha de antisemitismo.

Pesada mentira

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel calificó el jueves de lamentable el poema en el que Günter Grass manifiesta que la potencia atómica de Israel amenaza la paz mundial.

Este paso de Günter Grass de la ficción a la ciencia-ficción es de muy mal gusto; su poema es lamentable y carece totalmente de gracia, afirmó a Afp un portavoz del ministerio, Yigal Palmor.

Por su parte, el historiador Tom Segev estimó en el diario Haaretz (oposición de izquierda) que el escritor alemán era más patético que antisemita.

La comparación entre Israel e Irán es injusta, pues contrariamente a Irán, Israel jamás ha amenazado a otro país con borrarlo del mapa, agregó Segev.

En el cotidiano Maariv (centro derecha) el comentarista Shai Golden estima que las declaraciones de Günter Grass “no prueban necesariamente un antisemitismo, sino su rechazo a asumir su responsabilidad por sus crímenes históricos.

Estoy de acuerdo con casi todo lo que dice. Pero, simplemente, no tiene el derecho moral ni histórico de decirlo, manifestó Golden, invocando la traición del principio de la expiación con la que cada alemán debe estar comprometido para siempre cuando habla de Israel y de los judíos.

El poema Lo que hay que decir, escrito en prosa y publicado en el diario alemán Süddeutsche Zeitung, denuncia eventuales ataques israelíes contra instalaciones nucleares iraníes como un proyecto que podría llevar a la erradicación del pueblo iraní porque se sospecha que sus dirigentes construyen una bomba atómica.

Al mismo tiempo, está “este otro país, que desde años dispone de un arsenal nuclear creciente –aun cuando se mantiene el secreto– y sin control, porque no se permite ninguna verificación”, prosigue el Nobel de Literatura 1999, apuntando a Israel sin nombrarlo inmediatamente.

Grass denuncia el silencio generalizado de este hecho establecido –que califica de pesada mentira–, porque el veredicto de antisemitismo será pronunciado inmediatamente contra quien la rompa.

Capacidad nuclear de Israel

En 2006, Günter Grass, conocido por sus posiciones de izquierda, reconoció haber formado parte de las Waffen SS en su juventud.

La autoridad moral del escritor no se ha recuperado totalmente tras esa confesión.

¿Por qué sólo ahora lo digo (...) que la potencia nuclear Israel pone en peligro una paz mundial ya de por sí frágil? Porque hay que decir lo que mañana podría ser demasiado tarde, escribió en el poema Lo que hay que decir.

“También porque nosotros –suficientemente incriminados como alemanes– podríamos ser cómplices de un crimen que es previsible”, afirmó Grass, agregando que el pasado nazi de Alemania y el Holocausto no son excusa para guardar silencio sobre la capacidad nuclear de Israel.

Es ampliamente asumido que Israel es la única nación de Medio Oriente que posee armas nucleares, algo que el Estado judío no confirma ni desmiente. Estas armas pueden ser transportadas por submarinos Delfín, que Israel compró con un fuerte descuento de Alemania.