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Incertidumbre electoral impacta al peso

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Economía Moral

La pobreza en México: magnitud, evolución y estructura/ VIII

Evolución de la pobreza de ingresos (MMIP) por tipo de localidad, 1992-2010

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De pactos e inversiones

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La #MarchaYoSoy132: nuevo lenguaje

Wirikuta: triunfo de la sociedad
L

a minera canadiense First Majestic Silver cedió ayer al gobierno federal sus títulos de concesión ubicados en Wirikuta, la región sagrada del pueblo wixárika (huichol), localizada en siete municipios de San Luis Potosí y declarada área natural protegida desde 1994 por el gobierno de esa entidad. En un acto de entrega simbólica de los títulos de concesión a representantes de esa comunidad, el titular de la Secretaría de Economía, Bruno Ferrari, afirmó que estamos comprometidos con la protección y la preservación de las manifestaciones culturales de los pueblos originarios de nuestro país. En tanto, el titular de Gobernación, Alejandro Poiré, dijo que las 45 mil hectáreas que abarcan los títulos de concesión cedidos por la compañía canadiense pasarán a formar parte de la reserva minera nacional, lo que evitará que se vuelvan a concesionar en el futuro.

Patricia Peñaloza
El Correo Ilustrado

Se opone a cambiar nombre al Museo de la Ciudad de México

D

eseo referirme a la propuesta del jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard Casaubon, de poner el nombre del escritor Carlos Fuentes al Museo de la Ciudad de México. Me parece que se trata de una propuesta precipitada, motivada por legítimos afectos hacia una persona con grandes méritos, que gozó de respeto y admiración.

Generales: ¿justicia o juegos de poder?
L

a posición de Felipe Calderón fue clara: Recurrimos al Ejército porque las policías de los estados y municipios no eran confiables. Una postura conveniente, que enfatizaba la necesidad de usar al Ejército y permitía a Calderón rebatir a quienes consideraban inconstitucional el uso de las fuerzas armadas. Los invitaba a anteponer el interés del país por encima de pruritos legales. A pesar de todo, la posición presidencial resultó ser un arma de dos filos: lo obligaba a reconocer, muy a pesar suyo, que el Ejército era la última línea de defensa antes del Apocalipsis. Significaba un paso antes de entregar la plaza. Y así lo consideró el Ejército, cuando hace dos años se rehusó a regresar a los cuarteles para que Calderón cumpliera con Naciones Unidas la promesa de iniciar la retirada. Los militares alegaron que el combate al narco era una misión ineludible, porque el crimen organizado había puesto en riesgo la viabilidad del Estado.

Jorge Camil
Historia de una infamia
S

ucumbíos, historia de una infamia (Refugio Bautista Zane, et. al., México: Universidad Autónoma de Chapingo-UACM-, 2011) es un libro de investigación, testimonio y denuncia de un crimen de lesa humanidad, de una transgresión a las leyes de la guerra, de una violación a la soberanía de una nación y de la sempiterna injerencia imperialista en la vida de nuestros pueblos, que ocasionó, el primero de marzo de 2008, el asesinato a mansalva de 25 personas y dejó heridas graves a tres sobrevivientes. De los muertos, cuatro eran mexicanos, al igual que una de las mujeres heridas. Los cinco eran estudiantes, con entrada legal en Ecuador, conocidos en nuestro país por su solidaridad con el pueblo colombiano y que habían llegado el día anterior de visita al campamento guerrillero, sede del considerado negociador y canciller de las FARC, comandante Raúl Reyes, blanco principal del bombardeo, ametrallamiento y ocupación por fuerzas aéreas y terrestres del ejército colombiano.

El Estado mexicano, a juicio en Juárez
E

l calentamiento social y el calentamiento global convergen en Juárez, en Chihuahua, como en pocas partes. La sequía y el calor polvoso muestran los rigores de un clima cambiado por la irresponsabilidad humana. Los homicidios sin fin, las desapariciones, el desempleo, los feminicidios, las miles de casas abandonadas, las miles de empresas cerradas, los cien mil desempleados, hacen omnipresente el calentamiento social: un tejido social desgarrado, desigual, hirviendo de desigualdades, de enfrentamientos, competencias por lo más mínimo, atropellos de los poderosos a los pobres, desesperación.

Gilberto López y Rivas
Víctor M. Quintana
El acaparamiento total
P

rimero fue el control de las semillas. Las grandes corporaciones, sabiendo que son el principio de la vida y ávidas por dominar la vida de todas y todos, se lanzaron al control de un bien común que las haría poderosas. Muchas fueron las estrategias: patentaron la vida, hicieron desaparecer muchas variedades autóctonas con suposiciones productivistas, engendraron simientes estériles que se llaman híbridas o transgénicas; engullen a las pequeñas empresas locales de semillas o financian el Arca de Noé en el Polo Norte, donde las preservan (para ellas) en un gran banco de germoplasma.

Sonetos del amor oscuro
A

quel rubio de Albacete/ Vino madre y me miró/ ¡No lo puedo mirar yo!/ Aquel rubio de los trigos hijo de la verde aurora, alto, solo y sin amigos/ pisó mi calle a deshora/ La noche se tiñe y dora/ de un delicado fulgor/ ¡No lo puedo mirar yo!/ Aquel lindo de cintura/ sentí galán sin/ sembró por una noche obscura/ su amarillo jazminero/ tanto me quiere y lo quiero/ que mis ojos se llevó/ ¡No lo puedo mirar yo!/ Aquel joven de la Mancha/ vino, madre/ ¡no lo puedo mirar yo!

Gustavo Duch Guillot *
José Cueli
65 Festival Internacional de Cannes
El diablo, probablemente
C

annes, 24 de mayo. El estreno en función de prensa de Post tenebras lux, del mexicano Carlos Reygadas, resultó muy polémico. Sonoros abucheos se escucharon al final de la proyección, contrarrestados por algunos aplausos. Tal vez quienes abuchearon esperaban otra Luz silenciosa (2007) y encontraron, en cambio, la que es quizás la película más sincera del director hasta el momento.

Leonardo García Tsao