“Está más que comprobado el nivel de la música popular, su arraigo y fuerza en todos los sectores de la sociedad mexicana. Por ello, ahora estaré en concierto en el Palacio de Bellas Artes, el próximo sábado primero de septiembre, con un programa que incluye mi repertorio tradicional, con Coincidir, y de las autorías de Marco Antonio Solís, El Buki, Juan Gabriel y Joan Sebastian”, expresó ayer en entrevista la cantante Guadalupe Pineda.

La charla se desarrolló en una terraza del máximo recinto cultural del país, donde Pineda se dijo más que contenta por estar una vez más en el foro de Eje Central y Juárez.

Lucía una vestimenta de color negro y como toque de distinción una chalina azul, bordada con perlas, a tono con el día brillante a esa hora, hacia el mediodía. De muy buen humor contestó que la que viene será la sexta ocasión que cantará en Bellas Artes.

De la sociología al arte sonoro

Desde niña supe que iba a ser cantante y me preparé para ello; abandoné la carrera de sociología para centrarme en mi objetivo. Recuerdo mis primeras presentaciones en peñas y pequeños cantabares, y cafés, en los que me acompañaba un guitarrista, que para mí sonaba a toda una orquesta.

De ese rapidísimo viaje al pasado volvió al presente: “En el mundo pasan muchas cosas, la mayoría negativas, si atendemos a lo que nos informan los noticiarios cada día. Si esperamos las condiciones óptimas para cantar sería muy difícil todo y no haríamos nada en el arte ni en ninguna de las actividades humanas. En el mundo siempre están pasando cosas; ocurren novedades que pueden gustarnos o no.

“Yo diría que este concierto llega en un momento maravilloso de mi vida: justamente cuando tengo la voz plena, madura; cuando cumplo –este 2012– mis 35 años de trayectoria profesional. Por todo lo que he hecho siempre será algo especial volver a Bellas Artes, donde me presenté por primera vez en 1985.”

Al decir esto último abrió los ojos un poco más de lo normal y un rayo de recuerdo, un haz muy brillante tocó su memoria y se detuvo en la eternidad de un instante. Guadalupe Pineda se retrotrajo a esa dimensión espacio-temporal que conforma lo íntimo, eso que sólo pertenece a cada quien y que puede ser secreto.

Ha cultivado el canto nuevo, la denominada canción de protesta con influencia de Bob Dylan y Joan Báez; la canción tradicional latinoamericana en el horizonte creativo de Mercedes Sosa, Víctor Jara y tantas otras voces de quienes se definen como cantores y no como cantantes, pues los primeros tienen como bandera el compromiso con la letra y la música, mientras los segundos pueden estar solamente involucrados con el comercio de la música.

Son memorables los conciertos en los años 70 en los foros donde se realizaban conciertos en apoyo a socialistas y comunistas, al PCM, al PSUM, al PMT, y tantos otros movimientos de izquierda o que pugnaban por el respeto a los derechos humanos, por la libertad y la defensa de las garantías sociales y civiles. Todo esto podría enmarcarse en la emblemática Yo te nombro, donde luce su voz al lado de Eugenia León.

Siempre será especial volver a Bellas Artes, donde me presenté por primera vez en 1985, dice Guadalupe PinedaFoto Fernando Aceves

A Guadalupe Pineda se le achaca de manera crítica haber sido la iniciadora de la comercialización del canto nuevo al programar en estaciones de radio comerciales el tema Yolanda o Te amo, de Pablo Milanés. A distancia de años tal hecho se convirtió en virtud al considerarse que más bien sirvió para sacar del ostracismo una manifestación sonora y poética que valía la pena dar a conocer.

Añadió que en sus conciertos anteriores en Bellas Artes ha estado sola o ha compartido escenario con voces como las de Fernando de la Mora, Los Niños Cantores de Morelia, Camerata de las Américas, en un homenaje al bolero con la participación de lujo de Amparo Montes y Tania Libertad; posteriormente con otro tributo al bolero, con iconos del nivel de Olga Guillot, Los Tres Ases, Marco Antonio Muñiz; regresó a una presentación especial por los festejos del bicentenario de la Independencia, en que cantó con la mundialmente famosa Olivia Gorra. Estar en este espacio siempre será un privilegio, expresó.

Sobre el prurito que ponía barreras a la presentación de figuras populares en Bellas Artes, expuso que no hay que olvidar que en sus inicios la ópera fue popular. “Esta manifestación hoy cultural tuvo un momento similar al de las canciones de José Alfredo Jiménez. Es decir, los compositores de ópera eran o fungían como hoy lo pueden hacer autores como José Alfredo. Creo que siempre hay que tener un espacio abierto al canto popular, y ahora lo voy a interpretar, así como trova latinoamericana, algo de mi nuevo disco, A flor de piel, como Tú de qué vas, de Franco De Vita, o Momentos, que para mí es muy especial porque la letra dice que la vida está llena de momentos, de cosas que no sueles valorar, y luego, cuando vuelves, te das cuenta de que ya no las puedes recuperar ni vivir. Por esto voy a cantar esta pieza, aquí en Bellas Artes.

“A esto hay que añadir los temas que todos conocen, como El unicornio azul, Cómo fue, Gracias a la vida, Yolanda, Fina estampa y otras cosas nuevas, como el Concierto de Aranjuez. ¡Voy a cantar a José Alfredo Jiménez!, del cancionero universal voy a interpretar Amapola, una de las favoritas de toda mi vida y que no había hallado dónde cantarla; en este nuevo me dije: ahora es cuando. Habrá un popurrí popular con algo de Joan Sebastian, Marco Antonio Solís, Juan Gabriel. ¡Ya las escucharán! Por supuesto, no puede faltar Coincidir. Se quedaron fuera varios temas, pero estoy contenta con lo elegido.”

Dada la demanda de localidades para el concierto de las 20 horas, se abrió a la venta el boletaje para una segunda presentación, que será el mismo día a las 17 horas. Pueden adquirirse en Ticket Master y en taquillas del recinto. Precios: luneta, mil 050 pesos; anfiteatro, 650, y galería, 250.