Economía
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Continúan al alza los precios de los alimentos; el huevo reporta el mayor aumento

En agosto, inflación de 4.57%, el nivel más alto en tres años: Inegi

Incremento inesperado: Banco de México; mantiene en 4.5 por ciento la tasa de interés

 
Periódico La Jornada
Sábado 8 de septiembre de 2012, p. 18

El precio de los alimentos siguió al alza en agosto. El del huevo no fue el único, aunque sí uno de los de mayor incremento. Como resultado, el mes pasado la inflación fue la más alta en tres años para un periodo similar, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Para las familias, el costo de pagar los bienes y servicios que consumen ha crecido, en los últimos meses, a un ritmo mayor al que se están dando las revisiones salariales. El Banco de México calificó de incremento inesperado el rebote inflacionario de los últimos meses.

Medido en términos anuales, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), el indicador que mide la inflación, creció 4.57 por ciento en agosto, un nivel no visto desde marzo de 2010. Esa variación supera el límite máximo fijado al inicio de este año por el Banco de México y, a partir del cual, se actualizan la mayoría de precios en la economía, incluidos los salarios.

El Banco de México fijó para este año una meta de inflación de 3 por ciento, con un límite máximo de 4 por ciento. La realidad se ha encargado este año de echar por tierra las previsiones del banco central, afectadas sobre todo por un mayor costo al público de los alimentos y, en particular, de los bienes pecuarios.

La inflación anual ha registrado un incremento inesperado en los últimos meses, consideró este viernes el Banco de México, al hacer pública la decisión de su junta de gobierno de no variar la política monetaria seguida hasta ahora. Así, la tasa de interés de referencia del banco central –herramienta que puede contribuir a acelerar o detener la actividad económica– se mantendrá en 4.5 por ciento.

En agosto pasado, la inflación fue de 0.30 por ciento, la más alta para este mes desde 2008, cuando llegó a 0.58 por ciento, reportó el Inegi. Una muestra de la forma en que los precios se han movido este año está en el hecho de que en agosto de 2011, la variación del INPC había sido de 0.16 por ciento.

El precio promedio de los bienes pecuarios, rubro en el que se incluyen carnes, pollo y huevo, se incrementó 1.80 por ciento en agosto, cinco veces más que el promedio general de 0.30 por ciento, apuntó el Inegi.

Visto en términos anuales, la inflación de los productos pecuarios fue, entre agosto de 2011 y el mismo mes de este año, de 13.69 por ciento, más del doble del promedio general, de 4.57 por ciento, agregó la información del Inegi. Para las frutas y verduras, la inflación anual se situó en 8.77 por ciento. En el conjunto de bienes agropecuarios, la inflación anual fue de 11.76 por ciento.

El huevo, según el Inegi, tuvo una alza en agosto de 11 por ciento y fue el producto o servicio con la tasa más alta de todos los productos a cuyo precio da seguimiento el Inegi.

La inflación general anual en México ha registrado un incremento inesperado en los últimos meses. Esto ha sido consecuencia, primordialmente, de choques de oferta (como) la epidemia de influenza aviar y aumento reciente en los precios internacionales de algunos granos, explicó el Banco de México.

Los choques de oferta, según el banco central, han dado lugar a incrementos en los precios de algunos alimentos, cuyo efecto sobre la inflación se anticipa (que) será de carácter transitorio. No obstante, abundó, dada la intensidad de los choques que han afectado los precios de los alimentos y el potencial que persiste de una mayor turbulencia en los mercados financieros internacionales, se considera que los riesgos para la inflación en el corto plazo continuaron elevándose.

En julio pasado, y por primera vez en 30 meses, el incremento promedio obtenido por los trabajadores en sus negociaciones salariales fue menor al aumento de los precios, provocado principalmente por un mayor costo de alimentos básicos, según datos del banco central y la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS).

En julio pasado, los salarios contractuales tuvieron un decremento, en términos reales, descontado el efecto de la inflación, de 0.06 por ciento, de acuerdo con datos del Inegi, las juntas federal y locales de conciliación y arbitraje y de las propias empresas, recopilada por la STPS.