Mundo
Ver día anteriorLunes 22 de octubre de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El PNV gana 27 escaños y la coalición Bildu 21; primeras elecciones sin acciones de ETA

Nacionalistas recuperan el poder en el País Vasco; se hunden PSE y PP

El partido ganador deberá buscar alianzas

Urkullu llama a construir la paz y la convivencia

Foto
Laura Mintegi (al centro), candidata de la coalición Bildu a lehendakari, ayer en Bilbao tras conocer los resultados que colocan a su partido como segunda fuerza política en el País Vasco. Es flanqueada por Rufi Etxeberria y Marian BeitialarrangoitiaFoto Reuters
Enviado
Periódico La Jornada
Lunes 22 de octubre de 2012, p. 23

Bilbao, 21 de octubre. Las históricas elecciones autonómicas en el País Vasco, por ser las primeras en las que no estuvieron presentes acciones de la organización armada ETA, se convirtieron en el primer gran triunfo de las formaciones nacionalistas que pugnan por la independencia. El Partido Nacionalista Vasco (PNV) fue el más votado, con 27 escaños, y recuperará el poder después de tres años en la oposición, mientras la coalición de la izquierda nacionalista, Bildu, obtuvo 21 diputados, con lo que se consolida como la segunda fuerza de la región. Se abre así un escenario de pactos poselectorales en el que la tercera fuerza, el gobernante Partido Socialista de Euskadi (PSE), gran perdedor de la noche, será decisiva con sus 16 escaños.

Hace tres años se celebraron unas elecciones autonómicas anómalas, al no concurrir una de las fuerzas políticas de mayor peso en la sociedad vasca: la izquierda independentista y nacionalista, cuyas siglas electorales fueron proscritas por parte de los tribunales españoles por su presunta vinculación a ETA. El reparto de escaños de los comicios de 2009 permitió por primera vez un gobierno presidido por un socialista, Patxi López, que para su investidura contó con el apoyo del derechista Partido Popular (PP).

Abstención de 35 por ciento

En estos tres años, además de la crisis económica y el aumento del desempleo y la pobreza, el País Vasco ha vivido una de sus etapas más esperanzadoras en relación al histórico conflicto, gracias a la declaración de ETA del pasado 20 de octubre, en la que anunció el cese definitivo de la lucha armada. Una declaración que ha marcado la agenda política de la región y ha permitido, entre otras cosas, la integración de la coalición Bildu, integrada por cinco partidos de la izquierda nacionalista y en la que se rechaza expresamente en sus estatutos la violencia de ETA.

Los resultados electorales confirmaron el avance del nacionalismo, tanto el conservador como el progresista, frente al desgaste de las formaciones españolistas y las principales responsables de las medidas de austeridad y recortes de los servicios públicos básicos, PP y PSE, que perdieron en conjunto 12 diputados.

El Parlamento vasco quedará integrado con 27 diputados del PNV; 21 de Bildu; 16 del PSE; 10 del PP, y uno de la minoritaria y conservadora Unión Progreso y Democracia (UPyD). La mayoría absoluta, de 38 diputados, obligaría al PNV a formar una alianza con los socialistas o tendría una opción más difícil y remota, una alianza entre las tres fuerzas conservadoras de la región, sumando a su gobierno al PP y a UPyD. La abstención superó 35 por ciento, uno de los índices más altos en la historia.

Es decir, que más de seis de cada diez vascos depositaron su confianza en un partido que pugna por más soberanía, más autogobierno y, en último término, la independencia del Estado español siguiendo así la senda marcada por Cataluña, que aspira a iniciar un proceso de separación de Madrid a partir de las elecciones del próximo 25 de noviembre. Si se sumaran los diputados del PNV y Bildu serían 48, frente a los 27 de las fuerzas que defienden el actual modelo autonómico o, incluso, ceder frente a la ofensiva centralista impulsada por el gobierno del conservador Mariano Rajoy.

Cabe señalar que Bildu logró el mejor resultado de la historia de la izquierda nacionalista, superando los 14 diputados que logró Euskal Herritarrok (EH) en 1998, en plena tregua de ETA y en medio de un proceso de paz que no prosperó. Desde 2003, que se aprobó una Ley Orgánica de Partidos Políticos creada a modo para proscribir a Batasuna, se han ilegalizado 13 formaciones, marcas electorales o siglas vinculadas a la izquierda nacionalista. Durante este periodo los principales dirigentes de la extinta Batasuna, incluido Arnaldo Otegi, han llevado a cabo un proceso de consulta a las bases de su electorado para definir una nueva estrategia, en la que se rechaza de forma expresa la violencia de ETA

Íñigo Urkullu, aspirante a presidir el nuevo gobierno vasco, fue recibido al grito de “¡lehendakari!” por decenas de simpatizantes y señaló, tras conocer su triunfo, que ha sido la primera vez que la sociedad vasca ha podido elegir a sus representantes sin la amenaza de ETA, ha emitido su opinión en plena libertad, al tiempo que advirtió: nos enfrentamos a una situación de crisis y de paro (desempleo), igual que ayer y mañana, necesitamos construir la paz y la convivencia.

El futuro mandatario vasco añadió: empieza un nuevo tiempo, pues Euskadi está en un momento muy importante para su futuro, porque los desafíos de este país exigen acuerdos fiables y estables. Para resolver el desempleo, el aumento de la pobreza, la construcción de la paz definitiva. También hizo una defensa de su proyecto europeísta y su convicción de que Euskadi debe trabajar por la construcción de una Unión Europea más sólida y justa.

Laura Mintegi, candidata de Bildu, también fue recibida con entusiasmo por seguidores, que enarbolaban banderas vascas y gritaban una de sus consignas habituales: ¡independencia! La también escritora y política señaló que es hora de empezar a pensar en pueblo, como pueblo y como país. Y frenar las órdenes que llegan desde Madrid y decirles que no nos van a parar sus imposiciones. La candidata de la izquierda nacionalista remató: este camino no tiene marcha atrás.

El derrotado de la noche, el único lehendakari socialista en la historia de la región, Patxi López, señaló que estos no son los resultados que esperábamos, pero la ciudadanía ha hablado y lo respetamos. Al tiempo que advirtió que el PSE será determinante en el futuro inmediato de la región.

A partir de este lunes iniciarán los contactos y las reuniones interpartidistas para perfilar el futuro acuerdo que gobierno.