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Ver día anteriorLunes 22 de octubre de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Aprender a Morir

Otra perspectiva

“L

as ideas no tienen propietario, son en sí mismas ‘universales’. No pretendo ningún tipo de crédito sino que mi satisfacción es estar en comunicación con ese insólito espacio y que algo de lo aprendido pueda servir a otros”, dice un lector que omite su nombre y expone en un correo:

“El cristianismo es un asunto de fe. La ortodoxia afirma que la fe en Dios, creer que Dios existe y que se relaciona con los hombres, a quienes llama creaturas de Dios, es una gracia que Éste otorga o bien no otorga, pues se dice que Dios es libérrimo. La consideración de la muerte en sí misma tiene que hacerse desde la fe. La razón sola no alcanza a comprenderla, pues, como dice Unamuno en El sentido trágico de la vida: ‘Con la razón sólo puedo pensar que así como antes de nacer yo no era, al morir volveré a ese estado de no ser’.

“Se dice que Dios es el creador de cuanto existe y que da la vida y la quita, y el catecismo indica: ‘Nada hay más cierto que la muerte ni más incierto que la hora y el lugar de la muerte’. El cristianismo afirma que Cristo es Dios, que se hizo hombre en un lugar y época determinados y que lo hizo para salvarnos del pecado mediante su pasión y muerte aceptadas libremente. Pero el cristianismo tiene su origen en la religión judía y está fuertemente influido, si no es que determinado, por dicha religión.

“La creencia en espíritus benignos y malignos es anterior al cristianismo y se encuentra entre las convicciones más añejas de la humanidad. ‘Diablo’ no es concepto original sino un helenismo: Dia Bolos, lanzar alrededor, distraer. El concepto de los judíos es Ha-Satan, ‘el opositor’, o sea nuestro Satanás. Y es lógico que los sometidos judíos pensaran que había un opositor: ¡el romano!, y que por ende buscaran un ‘salvador’: Ie-Yoshua. Ese concepto de ‘salvador’ no sólo era religioso, sino social o civil, y era también ‘un rey’, en hebreo mesías y en griego ungido: jristós.

“Separado el cristianismo del judaísmo el concepto de ‘rey salvador’ tiene que alejarse del contexto físico-social para hacerse más ‘espiritual’, y Dios que había elegido a un pueblo y había inspirado las escrituras, ahora se encarna en hombre y predica la salvación o buena nueva y luego voluntariamente se somete a su pasión y muerte en la cruz para salvar a toda la humanidad del dominio del mal. Esto es la redención, el significado de la muerte en el cristianismo, pero ese significado va más allá…”