Gaza, 19 de noviembre. Israel bombardeó hoy nuevamente blancos civiles en la franja de Gaza y elevó a 109 la cifra de palestinos muertos a causa de la ofensiva militar iniciada el miércoles pasado, al tiempo que aumentó la presión internacional sobre Tel Aviv para que pacte una tregua con el movimiento de resistencia islámica Hamas y busque una solución política duradera al conflicto con Palestina.

En su sexto día la operación Columna de Defensa dejó 31 muertos, incluidos cuatro miembros de una misma familia. Por la noche cayeron 80 bombas sobre blancos en Gaza, manteniendo el terror de la población, que ha sido testigo del disparo de mil 350 proyectiles en menos de una semana. Los grupos armados palestinos dispararon hoy 45 cohetes de fabricación artesanal sobre el sur de Israel y sólo uno impactó en una escuela vacía.

La fuerza aérea volvió a disparar por la noche sobre el edificio que alberga las redacciones y los estudios de producción de medios locales y extranjeros, un día después de que destruyó antenas y otras instalaciones en el mismo sitio y en la sede de una televisora palestina.

Yihad Islámica, organización armada radical, admitió que en el ataque de este lunes murió Ramaz Harab, militante que se encargaba de la guerra mediática.

Bombas señuelos

Israel se defendió de los cuestionamientos sobre la muerte de civiles al afirmar que los combatientes palestinos usan a las familias y a los periodistas como escudos humanos.

Reiteró la versión de que la ofensiva lanzada el miércoles pasado ha tenido el objetivo de destruir espacios “usados como puestos de comando y almacenamiento de armas.

No sé de ningún país del mundo que se esfuerce tanto como nosotros por evitar bajas civiles, dijo el portavoz del ejército israelí, Avital Leibovitch, quien subrayó que en las últimas horas la fuerza aérea dejó caer sobre Gaza volantes en los que se advertía a la gente mantenerse lejos de las instalaciones de Hamas.

Las naves israelíes también dejaron caer bombas señuelos que no estallan, pero supuestamente sirven para indicar por anticipado el punto donde la aviación disparará proyectiles auténticos, capaces de atravesar más de un techo de un mismo edificio de concreto.

Uno de los ataques aéreos fue ejecutado durante la noche por un cazabombardero F-16 sobre una vivienda en Beit Lahiya, en el norte de la franja, donde murieron dos niños y su padre. El domingo, otro proyectil destrozó la vivienda de otra familia y segó la vida de 11 personas.

La ofensiva israelí llevó hoy a las tres principales fuerzas políticas palestinas, Fatah, Hamas y Yihad Islámica, a establecer un compromiso de unidad, prometiendo terminar con la división que en 2007 condujo a un corto enfrentamiento armado en Gaza.

Las imágenes televisivas y las fotografías de niños muertos y de viviendas convertidas en escombros despertaron reacciones de indignación y condena a Israel en países árabes como Libia y en naciones de población musulmana, como Turquía y Pakistán.

Hackers lanzan más de 40 millones de ataques

En solidaridad con los palestinos, unos 500 activistas egipcios cruzaron la frontera con la franja de Gaza sin que el gobierno lo impidiera, algo impensable en los años en que gobernó el presidente Hosni Mubarak, quien renunció el año pasado presionado por las protestas populares.

Para sumarse a las condenas a Tel Aviv, un grupo de hackers paquistaníes se adjudicó la intervención del sitio en Internet de la empresa comercial Groupon, establecida en Estados Unidos, pero de capital israelí.

El hackeo al sitio se sumó a los 44 millones de ataques que según el Ministerio de Finanzas de Israel se han cometido contra páginas de Internet del gobierno desde el miércoles pasado.

En El Cairo, adonde viajó el primer ministro turco, Recip Tayyip Erdogan, para apoyar las gestiones egipcias de un cese del fuego en Medio Oriente, el gobernante fustigó la actitud de Israel frente a los palestinos.

Aquellos que asocian al islam con el terrorismo cierran sus ojos de cara a la muerte masiva de musulmanes y dan la espalda a la masacre de niños en Gaza. Por esa razón, yo digo que Israel es un Estado terrorista y que sus actos son terroristas, manifestó.

Fuera de la región también crecieron los llamados a la solución pacífica del conflicto palestino-israelí.

Un día después de que el presidente estadunidense, Barack Obama, y el premier de Gran Bretaña, David Cameron, llamaron a Israel a la contención, la Unión Europea (UE) y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) secundaron el exhorto.

Reunidos en Bruselas, los ministros de Relaciones Exteriores de los países miembros de la UE convocaron a un cese urgente de hostilidades y dieron su apoyo a los esfuerzos de mediación de Egipto, puesto que detener la guerra en la zona es del interés de todos.

El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, dijo: por supuesto que Israel tiene derecho a defenderse y los ataques contra Israel deben terminar, pero la comunidad internacional también debería esperar que Israel muestre contención. He dicho desde hace tiempo que tenemos que encontrar una solución política duradera para la franja de Gaza.

La presión sobre el gobierno israelí también provino hoy del interior, pese a que altos funcionarios ratificaron que las fuerzas armadas están listas para incursionar por tierra en Gaza, pero por ahora hay disposición a negociar una tregua. Según la prensa local, una delegación de Israel en El Cairo está atenta a las gestiones que desarrolla el gobierno egipcio.

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Ban Ki-monn, llegó esta noche a El Cairo para sumarse a los esfuerzos pacificadores, se reportó al cierre de esta edición.

Israel ya desplegó tropas, transportes, tanques y otras piezas de artillería móvil para desplazarlas de los límites de Gaza a territorio palestino. Además, según la radio israelí, de 75 mil reservistas disponibles, 40 mil ya fueron convocados.

Sin embargo, el primer ministro Benjamin Netanyahu y los titulares de las carteras de Defensa, Ehud Barak, y de Relaciones Exteriores, Avigdor Lieberman, terminaron a las cuatro de la mañana del lunes una reunión de análisis de la situación, hasta que acordaron dar más tiempo a El Cairo para que interponga sus buenos oficios.

Apoyan ciudadanos Columna de Defensa: sondeo

Una encuesta publicada por la prensa israelí reveló que 84 por ciento de los ciudadanos israelíes están de acuerdo con la operación Columna de Defensa, pero sólo 19 por ciento respaldan la idea de una nueva ocupación, casi cuatro años después de que Tel Aviv desarrolló la operación Plomo Endurecido, que causó la muerte de unos mil 300 palestinos en Gaza, en represalia por la muerte de una docena de habitantes del sur de Israel, víctimas de cohetes lanzados desde la franja.

El líder de la oposición Shaul Mofaz, quien años atrás ocupó el puesto de jefe del estado mayor del ejército, así como Giora Eiland, ex consejero de seguridad nacional, dijeron que es innecesario invadir Gaza esta vez. Un acuerdo se puede obtener en pocos días y sería preferible a una operación terrestre.

Según información del diario israelí The Marker, especializado en economía y finanzas, la invasión de diciembre de 2008 y enero de 2009 costó al Estado israelí mil millones de dólares, y apuntó que una hora de vuelo de un cazabombardero cuesta 15 mil dólares.

Para alcanzar una tregua Israel exige al gobierno palestino en Gaza, encabezado desde 2007 por Hamas, que erradique totalmente los ataques con cohetes.

Hamas, a su vez, exige el fin del bloqueo militar y económico impuesto desde hace varios lustros a Gaza, recrudecido hace cinco años, cuando el movimiento de resistencia islámica asumió el poder como resultado de su triunfo en las urnas.