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AMLO es el líder principal de Morena, esa es la realidad

Descarta subordinación y dice que su tarea es crear un partido

Andrés Manuel no me dice qué tengo que hacer, tenemos el mismo objetivo y cada quien cumplirá sus funciones dentro del movimiento. No se trata de quitarle votos al PRD, sino de restarle sufragios al bloque dominante, integrado por el PRI y el PAN. La finalidad es recaudar la mayor cantidad de votos en 2015

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Si hay cuatro partidos de derecha: PRI, PAN, Verde y Panal, qué tiene de malo que haya cuatro de izquierda, señala el dirigente de MorenaFoto Guillermo Sologuren
 
Periódico La Jornada
Domingo 25 de noviembre de 2012, p. 12

Recién electo presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que busca convertirse en partido político, Martí Batres destaca que esta agrupación no ve en el PRD a un adversario y que su interés no es quitarle votos a las formaciones de izquierda, sino al PRI y al PAN.

Descarta que se pueda dar una relación de subordinación entre él y Andrés Manuel López Obrador –el principal promotor de Morena–, como acusan sus adversarios.

Descendiente de militantes del Partido Comunista, Batres Guadarrama inició desde temprana edad su participación en la izquierda. Fue uno de los líderes del Consejo Estudiantil Universitario (CEU) y miembro fundador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), al que renunció a finales de octubre pasado para dedicarse de lleno a las tareas de construcción de la nueva fuerza política. A continuación los pasajes centrales de la entrevista realizada al diputado con licencia, ex secretario de Desarrollo Social del gobierno de la ciudad de México, quien fuera dirigente del PRD capitalino.

–¿Cómo es que se convierte en presidente del movimiento, cuando días antes había comentado que en su panorama no estaba buscar esa posición?

–En el Congreso Nacional se dio un ambiente que no sabía que se iba a dar. Después de la votación del consejo (en donde se ubica entre los más votados junto al ex candidato presidencial y a Paco Ignacio Taibo II), muchos compañeros empiezan a comentarme que tengo su apoyo. Yo incluso decía: ‘No, no va por ahí, ya tengo una responsabilidad en la Cámara de Diputados’, pero compañeros de provincia que no conocía, se manifestaron espontáneamente y la situación se da de manera natural, sin ningún tipo de amarres. Soy el primer sorprendido con el resultado.

–En su discurso dijo que este era un encargo y no un cargo, lo que ha dado pie a diversas lecturas, entre otras, que se asumía como un dirigente formal y que el real es López Obrador.

–La frase tiene que ver con la idea de ponderar la tarea, no el puesto. Está uno para cumplir un encargo que nos da el Consejo Nacional. Ahora bien, independientemente de esa frase, Andrés Manuel es el dirigente principal de Morena. Esa es una realidad política e histórica y, ¡qué bueno que el liderazgo más fuerte de este país esté en Morena!

–Con un liderazgo de ese peso, ¿qué posibilidad de maniobra tiene?

–Tengo una tarea que es la organización de un partido político en formación. Es muy grande, implica meterse a convocar a la gente. Imagina lo que va a significar hacer 2 mil 500 comités municipales y decenas de miles de comités de base, es un tarea muy laboriosa, entonces tengo mucho espacio para hacer tarea. Además, al estar al frente del movimiento soy el vocero para hablar de una gran cantidad de temas. Entonces tengo mucho trabajo y hay un equipo muy bueno: Clara Brugada, excelente cuadro de la lucha popular; Tere Lupe Reyes, también excelente cuadro de organizaciones de derechos humanos... Toda es gente de trayectoria de izquierda.

–¿Hay muchas críticas en torno a que sería una especie de títere de López Obrador?

–Llevó más de una década trabajando cerca de él, prácticamente desde el 99. Soy de izquierda desde la adolescencia, entonces la coincidencia con Andrés Manuel es natural. No es que me diga qué tengo que hacer, es que coincidimos en un proyecto y va a ser una muy buena relación, porque estamos en la misma idea. Yo voy a cumplir con mis funciones plenamente. Además, Andrés Manuel es una persona muy respetuosa y nunca ha sido impositiva.

–¿Entonces el que ambos coincidan, impide una relación de subordinación?

–Existe el mismo objetivo y cada quien va a cumplir una función dentro del movimiento. En términos formales el es el presidente del Consejo Nacional, yo del CEN; él va a estar en un recorrido nacional muy intenso, con una visión muy amplia y a mi me va a toca la responsabilidad sobre todo de organizar el partido.

–Luego que usted señaló que ser de izquierda es ser obradorista, Jesús Zambrano, dirigente del PRD, dijo que ser de izquierda es ser perredista y tener causas. ¿Qué opina de ello?

–Sin duda el PRD es una de las fuerzas de la izquierda mexicana. Pero, cuál es el problema de que haya varios partidos de izquierda, si hay varios de derecha, como dice Octavio Rodríguez Araujo en La Jornada. Tenemos cuatro partidos de derecha con registro: PRI, PAN, Verde y Panal. Y todo lo votan juntos. Bueno...hay cuatro de izquierda: PRD, PT, Movimiento Ciudadano y Morena, y van a jugar diversos roles. Ahora bien no podemos desconocer que el gran salto electoral de la izquierda ha sido bajo el liderazgo de López Obrador. Pasamos a 15 millones de votos.

–¿Por qué votar por Morena y no por el PRD?, se le pregunta durante la entrevista realizada en un restaurante de las calles de Eugenia, donde recibe continuos saludos y muestras de apoyo de los comensales.

–Yo diría, ¿por qué votar por Morena y no por el PRI o el PAN? Diría que la competencia es por restarle votos al bloque dominante. Lo que nos interesa es que la gente no siga votando por sus verdugos. No nos interesa quitarle votos a los otros partidos de izquierda. Todavía hay una franja de la población que vota por sus verdugos y nuestra gran responsabilidad histórica es convencerla de que deje de sufragar por el PRI y el PAN. Esa es nuestra misión si queremos llegar al gobierno de la República, para transformar el país.

–Pero la mayoría de los análisis refieren que este nuevo partido le va a quitar votos a los otros de izquierda que ya existen.

–Nuestro objetivo es restarle votos al PRI y PAN. El PRD no es nuestro adversario. Aunque obviamente Morena significa un nuevo salto en la izquierda mexicana, porque representa cercanía con la población, poner énfasis en la independencia política y en lo social; representa un vínculo importante con las luchas sociales y populares, y un rechazo tajante a las reformas estructurales. Todos esos son elementos distintivos de la organización, que tiene un reto complicado, el más difícil de todos es demostrar que puede hacer política sin los vicios tradicionales de ésta.

–¿Estarían pensando en alianzas con el PRD?

–No descarto alianzas electorales más adelante. Pero en 2015, nuestro objetivo es canalizar el mayor caudal de votos para Morena, para ganar el registro electoral. Damos por hecho que lo vamos a obtener. Hay una sobrada fuerza para ello. Hay dos etapas, una de ellas es cumplir los requisitos, tenemos que hacer 32 asambleas estatales con 2 mil afiliados. Nosotros vamos a hacerlas con un mínimo de 3 mil y hay varios estados donde hemos puesto la meta de 30 mil, 40 mil y 100 mil en el caso del DF. Son metas fuertes.

–¿Qué le dice a quienes critican la creación de otro partido? Sobre todo porque están en desacuerdo con canalizar recursos públicos a una nueva agrupación.

–No va a costar más dinero, porque los recursos destinados a participación política son los mismos, pero se distribuyen de otra manera. En una democracia la gente es la que decide qué partido debe existir, con su voto. Así han emergido y desaparecido fuerzas políticas, o aumentado y disminuido su tamaño.

–¿Qué opinión le merece la decisión de Alejandro Encinas de permanecer en el PRD?

–No vamos a presionar a nadie. No le estamos llamando a nadie para que venga. Con libertad cada quien decidirá. Alejandro es muy buen cuadro y en el momento que lo decida será bienvenido en Morena.