Opinión
Ver día anteriorMartes 27 de noviembre de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Itacate

Maíz en riesgo

E

l maíz ha formado parte esencial de nuestra cultura desde la antigüedad. Con talento y trabajo, nuestros antepasados lograron maíces tal como lo conocemos hoy. El esfuerzo para conseguir su domesticación admira a los especialistas en la actualidad. Técnicos y científicos indígenas lograron su difusión en gran parte del territorio nacional y más allá; México es centro de origen y diversificación del maíz. Se han clasificado hasta 59 razas y miles de variedades cultivadas en distintos ambientes naturales. Algunos fructifican en 40 días; otros tardan siete meses y más en alcanzar la madurez.

En estos trabajos participaron activamente las mujeres, pues a los avances agronómicos se suman los distintos maíces útiles en la cocina y la alimentación. Los hay especiales para reventar en seco (palomitas), para hacer tortillas, totopos, pinole, pozole, entre otros.

La diversidad del maíz y la cultura que lo rodea y sustenta representa un potencial básico para la humanidad; lo mismo ocurre con los parientes silvestres del maíz, que con el intercambio de polen crean una sinergia que los fortalece.

Como un regalo a los centros de poder, el sumiso gobierno saliente quiere imponer la siembra de maíz transgénico sin tomar en cuenta los innumerables riesgos, en especial pérdida de biodiversidad, daños ya comprobados en la salud y mayor dependencia. Esta decisión afecta también el mercado mexicano de productos orgánicos, que ha tenido gran aceptación y tiende al crecimiento. Para colmo, ninguno de los maíces transgénicos aporta beneficios reales.

Por ello, la Unión de Científicos Comprometidos con la Sociedad ha presentado una Declaración contra la siembra de maíz transgénico en México e invita a sumar esfuerzos para la salvaguarda de la gramínea, pues la evidencia científica con la que se dispone en la actualidad demuestra que una vez que se siembre maíz transgénico en cualquier parte de México será imposible evitar el flujo de transgenes hacia las variedades nativas.

Ahí se asegura que la siembra comercial de maíz transgénico afectará el modo de vida de millones de personas, incluso de campesinos, agricultores de mayor escala y consumidores. Hay que tomar en cuenta que aunque no consumamos el grano directamente, gran número de productos industrializados contienen ingredientes o componentes que provienen del maíz.

La declaración ha sido firmada ya por más de 2 mil especialistas del mundo, incluidos dos premios Nobel. Merece ser apoyada y difundida (www.uccs.mx/doc/g/planting-gmo-corn_es).