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Él y otros 4 fueron condenados en 2000 por espiar a anticastristas

Acepta Washington renuncia de agente cubano a la nacionalidad estadunidense
 
Periódico La Jornada
Sábado 11 de mayo de 2013, p. 23

La Habana, 10 de mayo.

Estados Unidos aceptó la renuncia a la nacionalidad estadunidense del agente de inteligencia cubano René González, quien a cambio se quedará en la isla y no tendrá que volver a ese país a cumplir el régimen de libertad vigilada, tras purgar 13 años en prisión por cargos de espionaje, informó este viernes el propio agente.

En jueves, la Oficina de Intereses de Washington en La Habana me extendió el certificado de pérdida de nacionalidad de Estados Unidos, dijo González, de 56 años y nacido en Chicago, quien había presentado la solicitud de renuncia el lunes para no tener que volver a territorio estadunidense luego de que la juez Joan Lenard aceptó modificar las condiciones de su libertad.

González es uno de los cinco agentes cubanos detenidos en Estados Unidos en 1998 y condenados a largas penas por espionaje en 2000. Cuba los considera héroes y afirma que no espiaban a Estados Unidos, sino a grupos anticastristas de Miami, Florida, que planeaban acciones violentas contra objetivos en la isla.

Ahora soy sencillamente ciudadano cubano; un patriota cubano, cosa que de todas maneras siempre he sido, sin que ello implique animadversión alguna hacia el pueblo estadunidense, hacia el país en que nací, dijo el agente en conferencia de prensa, a la que lo acompañó su esposa Olga Salanueva.

González, quien mostró a la prensa el certificado que le extendieron las autoridades estadunidenses, descartó que la aceptación de su renuncia a la nacionalidad haya sido un acto de generosidad de Washington: no les quedó otro remedio; es algo que le arrancamos al gobierno de Washington, dijo, pero abogó porque Cuba y Estados Unidos negocien sus diferendos.

González salió de prisión en octubre de 2011, tras cumplir una condena de 13 años, pero debía permanecer otros tres bajo libertad supervisada en Estados Unidos. El agente viajó a Cuba a finales de abril con permiso judicial para asistir al sepelio de su padre. Declaró que no va a sentirse libre hasta que sus cuatro hermanos estén de regreso con su pueblo, con su familia, con la gente que los quiere.