Con el Pacto por México pretendemos demostrar que podemos ser una oposición constructiva, que no necesita esperar a ser gobierno para realizar sus propuestas programáticas, asegura la dirigencia nacional del PRD en un análisis por escrito sobre su incorporación a este acuerdo nacional.

En el estudio reconoce que la mayoría de las propuestas contenidas en el pacto coinciden con los planteamientos de sus agendas legislativas, plataformas electorales y el programa del partido.

Pero manifiesta que con eso no pretende “borrar o ignorar ni las diferencias ideológicas ni la competencia política.

Tampoco ignoramos los enormes retos y dificultades para llevar a feliz término los compromisos del pacto (cuando) el 48 por ciento (de su contenido) depende de una exitosa reforma fiscal, 43 de los compromisos implican una reforma legal y 19 de ellos reforma a la Constitución.

La presidencia nacional perredista sostiene que el partido debe tener un papel protagónico en la construcción de acuerdos y (ser) pionero en la búsqueda de soluciones a los grandes problemas nacionales. Así que considera un gran acierto su incorporación al Pacto por México, junto con el PAN, el PRI y el presidente Enrique Peña Nieto.

Considera que ello permite demostrar que son una izquierda útil para el país y eficaz para alcanzar sus objetivos de ampliar la democracia, preservar y ampliar los derechos de la sociedad, impulsar el crecimiento económico.