El tema de la esquizofrenia en adolescentes, considerado como tabú para el teatro dirigido al público infantil, será puesto en escena con actores y títeres en la obra ¿Y mis colores?, escrita por Mercedes Gómez Benet, con dirección de Emmanuel Márquez.

Es una obra que de manera lúdica trata de fomentar la atención para el diagnóstico, tratamiento y rehabilitación de esa enfermedad mental, pero que cualquier público puede apreciar, apuntaron Gómez Benet y Márquez en charla con La Jornada.

En lo social, explicaron los creadores escénicos, hay ciertos temas, como la muerte, el divorcio, el abuso sexual, la orfandad, la adopción o el sida, que son considerados temas prohibidos en el teatro para niños, pero en la vida cotidiana son una realidad, de la cual también debemos hablar a los más pequeños, detalló Márquez.

Es el caso de la esquizofrenia, entre los trastornos mentales, una de las enfermedades más discapacitantes, pero controlable.

De acuerdo con la siquiatra Betzabé A. Figueroa Fuentes, quien asesoró a la dramaturga y al director para la realización de la puesta en escena, “la mayor parte de los pacientes inician su padecimiento entre los 15 y los 35 años de edad.

Datos y cifras

Es una enfermedad poco común en los niños, por lo que es muy difícil reconocerla en sus primeras etapas. Las causas se desconocen, pero investigaciones recientes sugieren que se puede deber a cambios en el cerebro, factores bioquímicos, genéticos y del ambiente en el que se desarrolla la persona, apunta la especialista en el programa de mano, en el que se explica el punto de vista médico y las señales de alerta tempranas en los jóvenes con esquizofrenia.

De acuerdo con Márquez, a escala mundial se estima que uno por ciento de la población tiene ezquizofrenia. En México se calcula que entre 500 y 700 mil personas padecen esa enfermedad mental.

¿Y mis colores? es un espectáculo lúdico, con actores y títeres, dirigido a pequeños de seis años en adelante, en el que se cuenta la historia del paso a la adolescencia de Genaro y de su relación en su entorno familiar y escolar, donde nadie se da cuenta de lo que le ocurre, hasta que la abuela detecta ciertas señales y tiene que ser llevado al médico.

A Genaro le gusta dibujar y colorear, hasta que empieza a tener conductas extrañas. A sus dibujos les falta color, pues un monstruo lo ha convertido todo en blanco y negro, el quitó brillo a su mundo y lo aparta de su familia. Junto con sus hermanos más pequeños tendrá que aprender que dibujar y colorear lo ayudará a combatir la opacidad de sus visiones.

Para Mercedes Gómez Benet, los chicos que padecen esquizofrenia deben seguir un tratamiento médico y entender lo que les ocurre, pues se trata de una situación muy agresiva para quienes la contraen. “Hay una frase que me gusta mucho, que dicen los hermanitos, cuando notan que pasa algo: ‘¿tú crees que sea algo grave?’, le pregunta el hermanito a la hermana más pequeña. ‘Pues si vino el doctor, yo creo que sí; lo que pasa es que a veces los papás también necesitan ayuda’”, cuenta.

Por ello, en el programa de mano se integró información sobre la enfermedad, acompañada por datos de instituciones a las que se pueden recurrir.

¿Y mis colores?, con la compañía Figurat, se estrenará hoy a las 13 horas, en el teatro Isabela Corona (Eje Central Lázaro Cárdenas 445, junto a la Plaza de las Tres Culturas, Tlatelolco).