Cultura
Ver día anteriorMartes 4 de junio de 2013Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Flores oscuras, su libro más reciente, reúne relatos inspirados en notas periodísticas

Sergio Ramírez retrata a los golpeados por el destino en AL

Grandes esperanzas y enormes incertidumbres enmarcan el momento de la región, dice el escritor

Siento nostalgia por la revolución sandinista, pues la viví y hoy la contemplo en ruinas, indica a La Jornada

Participa en el homenaje que el Gobierno del DF rinde a José María Pérez Gay

Foto
Sergio Ramírez, en las instalaciones de Editorial Alfaguara, durante la charla con La JornadaFoto Jesús Villaseca
 
Periódico La Jornada
Martes 4 de junio de 2013, p. 4

Para el escritor nicaragüense Sergio Ramírez, América Latina vive un momento lleno de grandes esperanzas, pero también de enormes incertidumbres porque la mitad de la población está en condiciones precarias.

Ha habido grandes cambios políticos. Antes era insospechable que la izquierda pudiera llegar siquiera a los parlamentos o los municipios. Hoy eso ha ocurrido, hay una normalidad electoral que abre nuevos espacios bajo el riesgo de la demagogia y otros bajo el éxito de las transformaciones, pero siempre tenemos de frente a los pobres y de esta atmósfera es donde salen mis personajes de desigualdad, pobreza y marginalidad, expresa a La Jornada.

Ramírez acaba de publicar el libro Flores oscuras (Alfaguara), una colección de cuentos inspirados en noticias.

El ex vicepresidente de Nicaragua e integrante del movimiento sandinista que derrocó a Anastasio Somoza, en su libro refleja la realidad centroamericana mediante personajes marginales que batallan contra sus propios conflictos.

“La literatura –asevera el escritor– permite conocer lo que sucede en la sociedad actual. sobre todo la novela es una catedral muy compleja donde hay de todo, pero en el relato uno escoge una historia y la cuenta. Son hechos de la vida real de gente común que aparece en las notas periodísticas y me gusta recurrir a la crónica periodística para recrear la historia con mi imaginación, con recuerdos o con investigación. De ahí surgen mis personajes.

No son grandes figuras, sino personas que han sido golpeadas por el destino y que se descubren solamente cuando les ocurre algo singular, porque el destino las ha golpeado.

Costa Rica, sueño de nicaragüenses

Sergio Ramírez sitúa todos sus relatos en Centroamérica, la mayoría de ellos entre la Nicaragua actual y la de la revolución sandinista. Su universo literario está formado por jueces y abogados corruptos, boxeadores, personajes de circo y ex guerrilleros.

En las historias siempre la tragedia está ahí, afectando a la gente más humilde que es la que se ve más sacudida por estos vientos, es la que no tiene cómo defenderse. Tengo una historia de un inmigrante que va de Nicaragua a Costa Rica porque es el pequeño Estados Unidos para los nicaragüenses. El ingreso per cápita de Costa Rica es 10 veces mayor que el de Nicaragua, por tanto las personas se ven atraídas por estos salarios y hay miles de nicaragüenses en ese país viviendo esta vida trágica.

“Consideró que si nuestros países pudieran retener a la gente por ofrecer oportunidad de trabajo y educación no habría inmigración hacia Estados Unidos, y si no hubiera un mercado tan grande de drogas no habría toda esa estela de delito que va desde México hasta Centroamérica.

Desafortunadamente, el mundo no es así y a la escritura le toca reflejarlo como es. El escritor no debe ser más que un escritor, un cronista que narra lo que ve y eso es lo que hay.

En algunos de sus cuentos los protagonistas han vivido la revolución sandinista: militares o estrategas que al acabar la guerra no saben desenvolverse en la vida cotidiana y muchos terminan en la pobreza y el alcoholismo.

Sobre qué quedó de la revolución, el escritor indica: “Tengo una gran nostalgia por la revolución. Para mí fue un sueño muy real, yo viví dentro de ésta, fui un protagonista muy a fondo y ahorita me toca contemplarla en sus ruinas. Se habla mucho de la revolución en términos retóricos hoy día, pero para mí fue un conjunto de hechos a los que puedo regresar a explorar y traer de ahí historias que valen la pena contar.

Las revoluciones para mí en la literatura son los individuos, las personas que la vivieron y entonces esta nostalgia va a dar a lo que podría llamar personajes paradigmáticos, como la historia de este muchacho que participa en la toma del Palacio Nacional, que fue un hecho épico en la revolución y que anunció la caída de Somoza y muchos años después es asesinado en una cantina por un joven que la revolución no tuvo ninguna incidencia en su vida. Ese contraste para mí es impresionante.

Pérez Gay, curiosidad intelectual

Sergio Ramírez, quien hoy participa en el homenaje al escritor y diplomático José María Pérez Gay, recordó a Chema –así lo llamaban de manera cariñosa sus amigos– como un hombre de gran curiosidad intelectual que descubrió los nuevos ángulos de la literatura alemana y buscó cómo acercarla a la cultura latinoamericana, algo parecido a lo que hizo Sergio Pitol con Polonia.

El homenaje del Gobierno del Distrito Federal al autor de El imperio perdido es hoy a las 19 horas en el Museo de la Ciudad de México (Pino Suárez 30, Centro Histórico).

Asimismo, el jueves 6 de junio el autor de Flores oscuras charlará con sus lectores y firmará libros a las 19:30 horas en la librería Gandhi Mauricio Achar (Miguel Ángel de Quevedo 121, colonia Chimalistac).