Profesores de la sección 7 de Chiapas se sumarán al paro indefinido de labores convocado por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en su jornada de protesta contra la reforma educativa, por lo que a partir del próximo 28 de agosto se suspenderán clases en la entidad, que cuenta con matrícula de un millón 325 mil alumnos de prescolar, primaria y secundaria.

Alberto Mirón Vázquez, integrante de la dirección política del Bloque Democrático del magisterio chiapaneco, informó que entre 75 y 80 por ciento de los 55 mil trabajadores agrupados en esa sección participarán del paro masivo, y aseguró que miles de docentes se trasladarán a la ciudad de México para reforzar el plantón nacional del Zócalo capitalino.

Subrayó que el magisterio chiapaneco tiene una lectura clara de que el gobierno federal sólo ha establecido mecanismos de dilación del conflicto. Nos quieren tomar el pelo, porque es evidente que están muy claros en sus objetivos, y los quieren cumplir de manera urgente y rápida.

Tras concluir los trabajos de su asamblea estatal, convocada en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, enfatizó que uno de los acuerdos más importantes fue sumarnos a la convocatoria de la CNTE, pues enfrentamos una emergencia nacional y participaremos con una acción contundente.

El dirigente sindical explicó que el próximo miércoles iniciarán su jornada de protestas con una movilización en la capital del estado y la instalación de un plantón, para después partir al Distrito Federal, cuyo arribo se prevé en las primeras horas del jueves, a fin de accionar de manera conjunta con el resto de los contingentes.

Mirón Vázquez destacó que la respuesta del gobierno federal a las movilizaciones magisteriales en la ciudad de México, y en diversos estados, no han sido suficientes, pues en la minuta suscrita ante el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, para establecer un primer diálogo con senadores y diputados, no hay planteamientos concretos, se deja a los legisladores la decisión para que pueda o no concretarse un diálogo serio.

En el análisis regional que realizaron maestros de base de la sección 7 de Chiapas, se valora que no hay respuesta a la petición de abrogación de la reforma educativa en los términos que está planteada. En esencia, vemos que no se retoman nuestras demandas como trabajadores de la educación.

Por ello, indicó que de concretarse un encuentro con los legisladores el próximo lunes, como propuso el gobierno federal, se trataría sólo del inicio de un posible diálogo, donde deberá quedar muy claro que nunca nos hemos opuesto a la evaluación, pero que rechazamos su carácter punitivo.

Y agregó que la CNTE es una organización con propuestas, las hemos construido por consenso, y las presentamos ante las autoridades correspondiente, pero nada de esto fue considerado.

El magisterio disidente, insistió, defiende no sólo lo más sagrado que tenemos como personas, y es el derecho a defender el sustento de nuestras familias, también el que la escuela pública subsista.