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En Entre Ríos encuentran objetos robados en domicilios de los uniformados

Detenidos, 14 policías por los saqueos en la provincia argentina de Tucumán

La presidenta Cristina Fernández pide a los jueces actuar con rapidez contra los acusados

Corresponsal
Periódico La Jornada
Miércoles 18 de diciembre de 2013, p. 35

Buenos Aires, 17 de diciembre.-

Siete policías fueron detenidos por la ola de saqueos ocurridas en la provincia de Tucumán la semana pasada, en momentos en que la justicia investiga si hubo un atentado contra el orden institucional, en lo sucedido en Argentina, donde las fuerzas policiales en diversos lugares del interior se acuartelaron y dejaron en la indefensión a la población.

El fiscal general, Rodolfo Fernando Domínguez, adelantó hace dos días que la Comisión Nacional de Fiscales en principio, comparte que habría una afectación de principio de interés federal, y denunció que la extorsión policial dejó a la población desprotegida.

En estas horas continuaron los allanamientos en Tucumán donde con la detención de esto siete policías, suman 14 los detenidos acusados de presunta autoría mediata de los delitos cometidos durante la ola de ataques a comercios y viviendas mientras la fuerza de seguridad no prestaba funciones por un reclamo salarial.

La Secretaría de Información de Tucumán confirmó que también se busca a algunos prófugos y que la figura de autoría mediata significa que alguien colabora o instiga con su accionar para que se cometan delitos.

De esta manera se va confirmando tanto en Tucumán como en el caso de Concordia , Entre Ríos, donde se encontraron objetos robados en los saqueos en casas de policías que estuvieron en los paros, que hubo una conexión entre estos y los saqueadores de forma casi inmediata a que los huelguistas de las fuerzas de seguridad se acuartelaron dejando zona liberada .

El gobierno provincial, a través del fiscal de Estado, Jorge Posse Ponessa, presentó una denuncia por sedición contra los policías amotinados, por la modalidad de protesta ilegal que utilizaron.

De inmediato actuó la justicia y comenzó la identificación de los saqueadores determinando la responsabilidad policial en los hechos.

También en la provincia de El Chaco, en el noreste del país, se entregó hoy el ex comisario Juan Canteros, acusado de instigador de los hechos en esa provincia este mes.

El oficial que era buscado se presentó ante la Fiscalía N° 3 de la localidad que investiga la protesta de la policía del Chaco.

Canteros es investigado por abuso de autoridad, peculado e incumplimiento de los deberes de funcionario público: encabezó la movilización hasta Sáenz Peña, a bordo de un vehículo oficial, con la intención de liberar a los presos y buscar a los agentes del Servicio Penitenciario que reclamaban mejoras salariales, para actuar en la protesta.

En esa región la protesta policial se originó con empleados del Servicio Penitenciario Provincial y luego se extendió a la comisaria primera y posteriormente a la Jefatura de la Policía, de Resistencia, capital chaqueña. Se investiga además a suboficiales por robo de dinero destinado a los servicios de vigilancia y con vehículos.

Por otra parte, se utilizó la radio del Servicio 911 que usa la población para pedir ayuda, en este caso para instigar al levantamiento policial.

La presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, en su cuenta de Twitter, pidió a los jueces el pasado 14 que actúen y juzguen rápidamente a los responsables de esos episodios.

Asimismo condenó los alzamientos policiales,y advirtió que la policía no puede organizar la delincuencia para robar a la gente y los comercios, instalando miedo y terror.

Hizo referencia al mensaje del titular de la Conferencia Episcopal Argentina, José María Arancedo, quien tras reunirse con ella el pasado jueves 12, dijo que la policía no puede dejar huérfana a la ciudadanía.

De la misma manera mantuvo reuniones con la Federación Argentina de Iglesias Evangélicas sobre el mismo tema, los que también se expresaron sobre esta situación en forma similar a monseñor Arancedo.

La presidenta también mencionó el descubrimiento de objetos robados durante los saqueos de Entre Ríos en la casa de un policía de esa provincia, algo que, sostuvo, confirma definitivamente lo expresado el 10 de diciembre, durante el acto por los 30 años de democracia, en el que señaló la vinculación de las fuerzas de seguridad con los pillajes en distintas provincias.

En Entre Ríos los fiscales Fabio Zabaletta y Germán Dri allanaron domicilio de suboficial de policía provincial y encontraron varios lavarropas automáticos, una hidrolavadora, una aspiradora, un motor eléctrico y varias herramientas posiblemente sustraídas de locales comerciales, cita la mandataria en sus escritos.

Me parece que los hechos se explican solos y los personajes políticos que aparecieron también, reflexionó la mandataria.

El mismo policía al que se refirió la presidenta fue el que ingresó en la noche del domingo 8 de diciembre a la Jefatura Departamental en Concordia, y sujetó por la espalda al comisario Nelson Vega, subjefe de esa repartición, que fue golpeado por otros efectivos.

Fuertes han sido los conceptos de los últimos días de los funcionarios gubernamentales, ante un episodio considerado como desestabilizador por la mayoría de los analistas. El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, ha advertido asimismo que las corporaciones no pueden apropiarse del gobierno, en un reciente encuentro con los intelectuales de Carta Abierta.Capitanich sostuvo que después de haber vivido una semana tan intensa de protestas policiales y saqueos en distintas provincias es necesario promover la participación popular en el control de las fuerzas de seguridad porque los que deben proteger la vida y el patrimonio no pueden ser los mismos que promuevan los hechos delictivos.

Señaló que las protestas policiales tuvieron que ver con grupos corporativos o vestigios de la dictadura que siempre están al acecho, y aseguró que frente a ello hay una sola manera de responder: con mayor firmeza y más democracia.

Hay quienes sopechan sobre los cortes de luz de los últimos días, y advierten sobre los rumores que hablan de que se esperan sucesos semejantes a los vividos recientemente para el próximo 20 o 21 de diciembre, en una evidenbte acción sicológica contra la población.