Directora General: Carmen Lira Saade
Director Fundador: Carlos Payán Velver
Domingo 9 de febrero de 2014 Num: 988

Portada

Presentación

Bazar de asombros
Hugo Gutiérrez Vega

Hacia el encuentro
de José Rolón

Edgar Aguilar entrevista
con Claudia Corona

Maquiavelo y la
concepción cíclica
de la historia

Annunziata Rossi

Yves Bonnefoy y el territorio interior
Homero Aridjis

Nicolás Maquiavelo
a Francesco Vettori

Annunziata Rossi

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Columnas:
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Foto: www.claudiacorona.com

A los ocho años de edad, la pianista Claudia Corona (Xalapa, Veracruz, 1976) debutó como solista interpretando el Concierto en Re Mayor, de Joseph Haydn con la Orquesta Sinfónica de Xalapa. Desde entonces se ha presentado con las principales orquestas de México. A la par de su actividad concertística ha realizado grabaciones para la radio y televisión de Europa. A partir de 1994 reside en Alemania. Recibió, entre otras, la beca DAAD (Intercambio Académico Alemán). A la fecha ha grabado dos discos compactos: Música Latinoamericana, piezas latinoamericanas del siglo XX para piano solo, bajo el sello Quindecim Recordings (2001) y Naxos (2009). Recientemente grabó los conciertos para piano y orquesta de los compositores mexicanos Samuel Zyman y José Rolón, con la Sinfónica de Núremberg y la dirección de Gregor Bühl. Para hacer posible la grabación del Concierto para piano de Rolón, en su versión de 1935, Claudia Corona llevó a cabo la minuciosa labor de revisar y corregir los numerosos errores existentes en las partichelas del manuscrito original. El resultado fue el CD titulado Mexican Piano Concertos lanzado por el sello TYXart. El Concierto para piano, de José Rolón (Jalisco-1876, Ciudad de México-1945), empieza a ser considerado por parte de la crítica internacional una obra maestra dentro de los conciertos para piano del
siglo XX.

Hacia el encuentro de
José Rolón

entrevista con Claudia Corona

Edgar Aguilar

–Dedicaste año y medio a revisar y hacer algunas correcciones en el primer manuscrito del Concierto para piano y grande orquesta, de José Rolón. ¿No corresponde más este tipo de labor a un musicólogo o especialista en partituras originales que a una intérprete de ese mismo concierto que posteriormente lo habrá de ejecutar y grabar?

–De hecho, así es. Pero hasta ahora no había habido alguien que tuviera la idea y verdadera intención de ir al fondo del asunto y ver cuál era en realidad el impulso inicial de José Rolón al componer esta obra. En el caso de mi proyecto, era indispensable hacer esta revisión del manuscrito de 1935 y las partichelas para poder llevarlo a cabo. Lo hice yo misma, ya que no había nadie más que tomara esta tarea. Me decían en la Colección Fleisher, lugar donde se encuentra este manuscrito, que el archivero de la orquesta con la cual realizara la grabación tendría probablemente que corregirle algunos errores. Pero ya teniendo las partituras en mis manos me di inmediatamente cuenta de que esa responsabilidad no se la podía dejar a un archivero. Además, tuve la necesidad de tomar decisiones en varios pasajes e intervenir en el propio manuscrito del compositor para esclarecer partes que no estaban legibles y/o resueltas.

–Tu interpretación del Concierto para piano, de Rolón, es por momentos sumamente sutil. No hay excesos ni arrebatos rítmicos, pero se percibe una gran fuerza en algunos pasajes. Al escuchar el disco, da la impresión de que esa música te escogió a ti y no viceversa.

–Gracias por el cumplido; precisamente es mi intención como intérprete llegar a ese punto. En realidad, casi no hay cabida para excederse y realizar rubato, pues el ritmo preciso juega aquí –junto con el planteamiento armónico y formal de la obra– un papel muy importante y el ensamble con la orquesta requiere de un gran trabajo de equipo. El piano lleva un tratamiento obbligato, es decir, se funde con la orquesta en una gran sonoridad sinfónica y lleva partes de solo en muy breves momentos.

–Si pudieras hacer una analogía de lo que tú consideras debe ser una interpretación, en este caso de piano, ¿con qué lo emparentarías?

–El intérprete debe llegar al punto de ser el mejor “cómplice” de la composición y fundirse con ella, a tal grado que parezca como si en ese momento estuviera surgiendo la obra. Es similar a lo que hace un buen actor al interpretar un papel: se introduce tan profundamente en su personaje que su actuación surge de manera auténtica, y los espectadores tienen la sensación de identificarse, de entender y sentir diferentes emociones al verlo.

–¿Hasta dónde un intérprete tiene libertad de “salirse” de lo que le marca la partitura?

–En realidad la partitura nos dice mucho más de lo que a simple vista se ve. Lo que sí es fundamental para poner el trabajo en marcha y lograr un buen resultado es la identificación del intérprete con la composición. Lo que cada intérprete decide hacer después es totalmente subjetivo y bajo su propia responsabilidad.

–Los elogios de la crítica en países como Alemania, Bélgica, Austria o Estados Unidos han sido realmente fuera de serie acerca de tu reciente grabación. ¿Qué esperas de México respecto a tu trabajo como intérprete y respecto de la obra de José Rolón y de otros brillantes compositores mexicanos y latinoamericanos, prácticamente desconocidos o ignorados en sus países de origen?

–Con la grabación y reconstrucción del Concierto, de José Rolón, espero contribuir a renovar y a completar la imagen de la música mexicana del siglo XX. Sería fabuloso que en las salas de concierto de México se preocuparan las orquestas por buscar e integrar cada vez más este tipo de obras olvidadas o ignoradas –incluyendo también las de compositores actuales– en su repertorio, y con ello dar oportunidad a que estos compositores se escuchen y a que el público mexicano pueda percatarse, apreciar, valorar y conocer más a fondo la gran riqueza y diversidad que existe dentro de la misma música clásica en nuestro país y en Latinoamérica.

–¿No has pensado alguna vez escribir sobre tu experiencia personal y musical de todo lo que implicó desde un principio tu acercamiento a una obra excepcional como la de José Rolón?

–La verdad es que sí lo he pensado. Existen varios aspectos en torno a la historia tan compleja de esta maravillosa obra y de mi encuentro con ella, que sería muy bueno poder compartirlos con más detalle y trasfondo.

–¿Qué significado tiene para ti vivir en Alemania e interpretar a compositores mexicanos?

–Es mi manera de conjugar felizmente los dos mundos en los que he vivido desde mi infancia, tanto en el ámbito personal como en el profesional.