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Asegura que no existe vínculo entre el PAN y grupo extremista

Pentatlón de la UAG, semillero de neonazis, reconoce joven panista
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Los neonazis militantes del PAN en Jalisco, tres con atuendo militar y con cortes de pelo al estilo Hitler. El primero de izquierda a derecha es Juan Barrera Espinosa. La imagen ya fue eliminada del muro de Sebastián Sánchez Armas (que aparece como Sebas Armas)Foto tomada de Facebook
Corresponsal
Periódico La Jornada
Miércoles 2 de julio de 2014, p. 35

Guadalajara, Jal., 1º de julio.

Tres de los cuatro jóvenes militantes o simpatizantes del Partido Acción Nacional (PAN) que crearon el grupo neonazi Movimiento Nacionalista Mexicano del Trabajo se preparan ideológica y físicamente en el Pentatlón Deportivo Militarizado de los Tecos de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG), reconoció Juan Barrera Espinosa, el principal implicado.

Barrera Espinosa era consejero estatal estudiantil de Acción Juvenil del blanquiazul en Jalisco y diputado de mayoría relativa del Parlamento Juvenil Alonso Lujambio –donde se capacitan los prospectos panistas–, cargos a los que renunció luego del revuelo que causó en las redes sociales el surgimiento de dicho grupo.

“Ellos (los otros tres integrantes del grupo neonazi) pertenecen al Pentatlón Militarizado de los Tecos y por eso venían uniformados”, dijo Barrera al explicar por qué él y otros jóvenes, tres con uniformes de tipo militar, se tomaron fotos en las oficinas centrales del PAN en la entidad, las cuales después difundió en Facebook Sebastián Sánchez Armas, uno de los implicados.

En entrevista, Barrera Espinosa –de 20 años de edad y a quien la dirigencia estatal del blanquiazul investiga por su filiación con el grupo neonazi– negó pertenecer al pentatlón de los Tecos y reiteró que la única organización a la que pertenece es el PAN.

El Pentatlón Militarizado surgió en Guadalajara en la primera mitad del siglo pasado al amparo de la UAG y bajo la insignia de los Tecos, grupo financiado por el fallecido patriarca y fundador de esa universidad, Antonio Leaño Álvarez del Castillo, quien también patrocinó pentatlones militarizados en otras entidades, sobre todo en Colima.

El millonario, quien inició el clan de los Leaño y murió en 2010 a los 94 años, fue un declarado antisemita. En 1985, por ejemplo, otorgó el doctorado honoris causa al dictador paraguayo Alfredo Ströessner y, años antes, al tirano nicaragüense Anastasio Somoza.

En 1976 festejó el tercer aniversario del golpe de Estado en Chile, que llevó al poder al general Augusto Pinochet.

En 2010, tras la muerte de Leaño, el gobierno estatal, entonces a cargo del panista Emilio González Márquez (ex presidente nacional del Partido Demócrata Mexicano y quien ha sido ligado a la organización de ultraderecha El Yunque) participó en la misa de cuerpo presente que en la basílica de Zapopan encabezó el cardenal Juan Sandoval Íñiguez.

Otro destacado panista, Fernando Guzmán Pérez Peláez, entonces secretario de Gobierno y quien dos años después sería candidato a gobernador de Jalisco por el blanquiazul, también estuvo en la misa para despedir al patrocinador de los Tecos.

No obstante, Barrera Espinosa aseguró que en el PAN no hay grupos ni personajes que pertenezcan a una corriente fascista, que él mismo denostó.

El PAN no merece estar vinculado con este tipo de cosas, (por ello) renuncié voluntariamente a los cargos honoríficos que tenía en el partido (secretario estudiantil de Acción Juvenil y miembro del parlamento juvenil Alonso Lujambio), puntualizó.

–¿Eres afín al nacionalhumanismo que pregona este grupo?

–Para nada. Yo soy humanista y democrático. Ni yo ni el partido tenemos nexos con esas personas.

Uno de los panistas vinculados al grupo neonazi, Sebastián Sánchez Armas, usa desde hace años un corte de pelo similar al del dictador nazi Adolfo Hitler y es miembro del pentatlón.

En sus publicaciones y fotografías en redes sociales aparece con frecuencia junto a Juan Barrera Espinosa y hace comentarios contra la comunidad lésbica-gay, aunque el ex consejero estatal de Acción Juvenil del PAN sostiene que apenas lo conocía.

“A esa persona la he visto sólo en una o dos ocasiones y hasta ahí. A mí llegan chavos, de la universidad, amigos míos, que me dicen: ‘Oye, me late el PAN y quiero ver qué onda’. Yo los invito como a cualquier otra persona que esté interesada en participar en política, pero él (Sánchez Armas) no tiene nada que ver con el PAN; él es muy aparte”, precisó Barrera Espinosa.

Sin embargo, según el padrón panista, Sánchez Armas es militante desde enero pasado. Ambos participaron en una protesta organizada por Acción Juvenil hace unos meses contra el alza al transporte público. Armas vestía uniforme militar.

El ex síndico de Guadalajara y ex legislador local y federal panista Gustavo González Hernández, a quien Barrera llama mi líder, también se deslindó del grupo de jóvenes fascistas.

Yo veo en esa foto más bien una fiesta de disfraces de unos chavos. Les faltó alguien disfrazado de Hirohito, ¿no?, dijo en tono de burla sobre la fotografía tomada en la sede estatal panista meses atrás. Reconoció que dio a Barrera un cursito de debate político, pero insistió en que se trató de una puntada de chavitos que buscan cosas en qué creer sin saber la naturaleza real del nazismo.

El presidente estatal del PAN Jalisco, Miguel Ángel Monraz, reiteró que su partido no permitirá expresiones extremistas y afirmó que que se trata de un grupo ailslado de cuatro jóvenes que se metió hasta la cocina.