Alumnos del Instituto Politécnico Nacional (IPN) diseñaron una máquina para reciclar componentes de focos ahorradores de luz, a fin de reducir el impacto negativo en la salud y el medio ambiente. El aparato separa mercurio, aluminio, vidrio y electrónicos que posteriormente pueden ser comercializados.

Los estudiantes, del Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos (Cecyt-2) Miguel Bernard, advirtieron que inhalar vapores suspendidos de mercurio de esos focos puede producir irritabilidad, disturbios del sueño, temblores, problemas de coordinación, cambios en la visión o audición y pérdida de memoria.

El prototipo funciona con un módulo de control que dirige tres etapas. En la primera se coloca el foco en una pinza, luego lo traslada a un cilindro que cierra herméticamente y extrae el gas; posteriormente comprime la bombillas hasta romperlas y los residuos caen en una licuadora que los tritura. Ahí se realiza un proceso de soplado y de extracción donde se deja el vidrio libre de mercurio.

En un comunicado, señalaron que en el país hay aproximadamente 48 millones de estas bombillas, de las cuales al menos 916 mil contienen cinco miligramos de mercurio, y han sido desechadas sin tener ningún dato sobre su paradero y sin que exista un plan que garantice la seguridad de las familias que los tiran a la basura.

Con la recicladora, nombrada Poli-Spotligh, Sergio Alejandro Alcántara García, Brian Alberto Juárez Montiel, Luis Bruno Martínez Robles y Osiel Mikhailov Chávez López obtuvieron el segundo lugar en el vigésimo cuarto concurso Premio a los prototipos 2014 del nivel medio superior del IPN, en la categoría diseño para la industria.