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Ver día anteriorMartes 7 de octubre de 2014Ver día siguienteEdiciones anteriores
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México SA

Parálisis interna

Quimera externa

BCS en rebeldía

A

nte la nula capacidad mostrada para reactivar el mercado interno, el gobierno federal pone buena cara y sonríe porque, dice, el mercado externo mejora y esa es la alternativa, por mucho que la balanza comercial se mantenga en números rojos.

El Centro de Investigación en Economía y Negocios (CIEN) del Tecnológico de Monterrey, campus estado de México, lo registra así: ante la debilidad que ha presentado el mercado interno de nuestro país durante prácticamente todo lo que va del año (y el anterior), el desempeño del sector externo ha permitido que las cifras de crecimiento económico sean mayores a las observadas durante 2013 (aunque obvio es que la base de comparación resulta extremadamente baja). No obstante, mientras permanezca latente el riesgo de inestabilidad financiera internacional, la posibilidad de continuar creciendo a un ritmo mayor que en el pasado se verá afectada si nuestra economía sólo se ve impulsada por su comercio exterior.

En agosto pasado las exportaciones totales crecieron 2.1 por ciento a tasa anualizada, las cuales fueron impulsadas por la parte no petrolera, donde las exportaciones de manufactura aumentaron 4.4 por ciento encabezadas por el sector automotriz, cuyo desempeño fue 11.8 por ciento superior al observado durante el mismo mes del 2013. Por su parte, las importaciones totales aumentaron 4.8, donde los bienes intermedios exhibieron el mayor incremento (6.3), seguido por los bienes de consumo (0.6), mientras los bienes de capital se ubicaron en terreno negativo (-0.3).

Las mejores condiciones en la economía estadunidense no sólo han reflejado resultados favorables en nuestra balanza comercial, sino que el número de remesas que envían los trabajadores que se encuentran en ese país se ha visto beneficiado. El nivel de los ingresos por remesas de enero a agosto del presente año se incrementó 7.3 por ciento con respecto del mismo periodo de 2013, lo cual ubicó los ingresos por este concepto en más de 15 mil 600 millones de dólares. Aunque esta cantidad es mayor a la obtenida el año pasado (14 mil 570 millones), todavía se encuentra por debajo de lo alcanzado en 2007 (17 mil 576 millones), el año previo de la crisis. Lo anterior se debe a que aun cuando han existido aumentos significativos en la nómina no agrícola, los sectores de construcción y manufacturas han tenido una recuperación más moderada con respecto a otros sectores como el de servicios.

Adicionalmente, apunta el CIEN, los ingresos por turismo mostraron un incremento de 21.5 por ciento durante julio del presente año con respecto al mismo mes del 2013, lo cual se traduce en ingresos por 8 mil 342 millones de dólares, el nivel más alto para dicho periodo. Los factores que contribuyeron a dicho incremento fueron un mayor número de turistas extranjeros que visitaron nuestro país (alrededor de 2 millones más), además de que el gasto medio de cada uno también fue más alto en comparación con el año pasado (poco más de 10 dólares adicionales en promedio).

El sector externo de nuestro país se vio fortalecido con las mejores condiciones económicas de Estados Unidos. Los beneficios obtenidos se reflejaron en la balanza comercial mexicana, pero también han permeado hacia otros sectores como el turismo o incluso en la economía familiar por parte de las remesas. No obstante, si nuestra economía continúa dependiendo mayormente del sector externo, ante cualquier eventualidad que pudiera afectar la estabilidad de los mercados internacionales, sobre todo a nuestro vecino del norte, el impacto sobre la economía nacional traería consigo graves consecuencias, similares a las experimentadas durante la crisis de 2009.

Al comparar los ingresos por remesas con el número de personas empleadas en la nómina no agrícola estadunidense se observa una relación positiva. Sin embargo, al descomponer por sectores al empleo de Estados Unidos se registra que la relación se vuelve más fuerte en los puestos de trabajo relacionados con la construcción y las manufacturas. Dichos sectores han presentado una recuperación más moderada en términos de plazas laborales con respecto a otros, como es el caso de los servicios. De esta forma, mientras no se perciba un panorama más optimista en materia laboral para los sectores de la construcción y las manufacturas en Estados Unidos, resultará complicado alcanzar los niveles de ingresos por remesas que se tenían antes de la crisis económica más reciente, pero no necesariamente la última.

Las rebanadas del pastel

De la lectoría, desde Baja California Sur: “Odile literalmente borró los poderes estatal y municipal, hecho que fue origen de los saqueos de las primeras 36 horas. La ciudadanía emergió de la catástrofe sin dinero (nos pegó en fin de quincena), frente a la devastación y sin autoridad. Transcurrieron 36 horas adicionales para que se viera la llegada del gobierno federal, quien ha aprovechado la emergencia provocada por Odile de forma cínica. Para empezar, la obligación del gobierno federal es asistirnos en la catástrofe, pero ha sido manejada por él mismo como ‘ayuda’, y la entrega de despensas va acompañada de la sentencia ‘de parte del Señor Presidente’. Esto lo han hecho sobre todo en el área de Todos Santos. Frente a cámaras prometen maravillas de apoyo a los empresarios, pero ya sin cámaras empiezan los candados y el regateo. Todo esto acompañado de propuestas de proyectos gubernamentales ‘para la reactivación económica y desarrollo’ que contemplan la mega-minería como una ‘opción’ y al proyecto minero Los Cardones como ejemplo de minería a nivel mundial. En medio de la catástrofe, la secretaria de Turismo hace gala de ignorancia y/o servilismo declarando que ‘no existe discordancia entre proyecto turístico y minero’; por otro lado, el titular de la Semarnat, Guerra Abud, comparece ante el Congreso y actúa descaradamente como promotor del proyecto minero Los Cardones. Ante la insistencia en proyectos que incluyen la mega-minería como ‘opción’, la actitud lame-botas del gobernador, el desvanecimiento de los poderes municipales (que se oponen al proyecto de Los Cardones) y la indiferencia de EPN frente a la exigencia de cancelar el proyecto Los Cardones, se ha convocado el próximo 7 de octubre a la ciudadanía y dado aviso a los firmantes del Pacto de Todos Santos de acudir a la delegación de Semarnat en La Paz BCS para exigir la inmediata cancelación del proyecto minero Los Cardones. No pagaremos con oro, agua, salud y vida la obligación del gobierno federal de asistirnos en la catástrofe” (Víctor Adrián Trujillo Muñoz, [email protected]).