jornada


letraese

Número 220
Jueves 6 de Noviembre
de 2014



Director fundador
CARLOS PAYAN VELVER

Directora general
CARMEN LIRA SAADE

Director:
Alejandro Brito Lemus


pruebate


reseña

La cámara sangrienta
Angela Carter
Sexto Piso/2014


Cuentos de mujeres que no son hadas

"Y vivieron felices para siempre..." es el final tradicional de los cuentos de hadas que se ha impuesto a lo largo del siglo XX, gracias a la metamorfosis propiciada por estudios de cine de Hollywood, cuyo principal público era el infantil al que deseaban ofrecerles una visión del mundo en la que, por más complicada que fuera una realidad, ésta siempre llegaría a un desenlace colmado de felicidad, propiciado por el buen actuar de un hombre y la sumisión de una mujer en
eterna espera de su guía masculina por la vida.

Sin embargo, ¿qué ocurre cuando los personajes principales del cuento responden a los deseos carnales, cuando son víctimas de la corrupción y pasiones bajas de sus familias y personas cercanas y no desean hacer el bien, sino todo lo contrario? ¿Cuándo la sexualidad incluye violencia? Pero sobre todo, ¿cuándo la protagonista de la historia es una mujer y sus actos repercuten en sus semejantes?

Esas son algunas preguntas con las que la escritora británica Angela Carter desea resolver, o más bien, explorar la posibilidad de rehacer las historias mediante el ceñimiento a las versiones originales de muchos cuentos clásicos como los del francés Charles Perrault, que fueron transformados para ser llevados al cine y libros infantiles, y que ella retoma para aplicarles cierta dosis de perspectiva de género e invertir los roles tradicionales de los protagonistas..

El resultado del proceso literario son cuentos en los que los personajes centrales cargados de cierta heroicidad no son los típicos príncipes azules en cuyo actuar está en juego el orden del mundo, sino las mujeres quienes no desean ceñirse a las reglas del momento que las condicionan y cuyo fin último no es el bienestar común sino el propio, en todos los aspectos, incluido el del placer.

Reunidos bajo el título de La cámara sangrienta, Carter ofrece diez relatos, los cuales, a 35 años de su primera edición, han sido publicados de nueva cuenta en México, acompañados de las ilustraciones de la dibujante chilena Alejandra Acosta. (Leonardo Bastida Aguilar)



La memoria y el deseo.
Estudios gay y queer en México

Rodrigo Parrini y Alejandro Brito (coordinadores)
PUEG/2014


Identidades, cuerpos y desesos

Una antología tiene sentido si compila artículos que constituyan un aporte a un campo de estudios. Es aún más relevante cuando dicho campo apenas se está formando y nos encontramos en los inicios de una producción intelectual que debiera incrementarse en lo venidero. Ambas condiciones se cumplen en este caso. Los textos aquí compilados son novedosos y constituyen un aporte a las investigaciones sobre otras sexualidades en México, son producto de largos trabajos de investigación y reflexión y están sustentados en un material bibliográfico y empírico muy sólido.

Pero también representa un retruécano, por así llamarlo, a ciertas versiones establecidas de las historias e identidades minoritarias. En ese sentido, creemos que son textos de segunda generación en los debates que nos conciernen, lo que indica que existe una masa crítica de conocimientos que puede ser discutida. Sin embargo, también es necesario notar que se trata de un campo aún incipiente y en formación, por lo que la novedad de muchos de los textos compilados colaborará en su consolidación futura. Para que una discusión académica se intensifique y se profundice necesita líneas argumentales diversas e incluso divergentes.

Ha pasado inadvertido el hecho de que algunas narraciones sobre las sexualidades minoritarias tenían un carácter mítico. Lo mitos son necesarios porque permiten crear relatos
colectivos que dan cierto sentido y configuran algunos procesos sociales. Pero los mitos no
son piezas definitivas y pueden ser desarmados y vueltos a ensamblar.

Si tuviéramos que dirimir el tono de los artículos diríamos que en ellos prima la audacia. Hay algo inaudito en mucho de los trozos escritos y pensados. Nuestros colegas se han atrevido
a explorar mundos y subjetividades, historias y relatos, actos y pasiones, olvidos y subalternidades inéditos. La arqueología del pasado o la historia del presente son manifestaciones de un tesón personal, pero también colectivo, para explicar deseos, cuerpos
e identidades. (Rodrigo Parrini y Alejandro Brito).


S U B I R