Política
Ver día anteriorJueves 18 de diciembre de 2014Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
Disminuye el acoso

Envió cartas, hizo llamadas y se reunió con delegaciones de ambas naciones

El papa Francisco obtiene un éxito personal con el acuerdo Cuba-EU

El pontífice realizará su primera visita a Estados Unidos en septiembre de 2015

 
Periódico La Jornada
Jueves 18 de diciembre de 2014, p. 10

Ciudad del Vaticano.

El papa Francisco, el primer pontífice latinoamericano de la historia, participó activamente para lograr una reconciliación entre Cuba y Estados Unidos, que cierra más de medio de siglo de tensiones y abre una fase nueva para la historia de todo el continente americano.

Francisco, quien intervino en las negociaciones secretas que mantuvieron Estados Unidos y Cuba, envió cartas e hizo varias llamadas telefónicas personales; respetando su estilo simple y directo, recibió en octubre pasado en el Vaticano a delegaciones secretas de los dos países con el objetivo de que se pusiera fin a años de enfrentamientos, según reveló el mismo Vaticano en un comunicado.

En el curso de los meses pasados, el santo padre Francisco ha escrito al presidente de la República de Cuba, el excelentísimo señor Raúl Castro, y al presidente de Estados Unidos, el excelentísimo señor Barack H. Obama, invitándoles a resolver cuestiones humanitarias de común interés, como la situación de algunos detenidos, para dar inicio a una nueva fase de las relaciones entre las dos partes, informó el miércoles el Vaticano en un comunicado.

La nota de prensa agregó: la santa sede, acogiendo en el Vaticano, el pasado mes de octubre, a las delegaciones de los dos países, ha querido ofrecer sus buenos oficios para favorecer un diálogo constructivo sobre temas delicados, del que han surgido soluciones satisfactorias para ambas partes.

El Vaticano dijo que Jorge Mario Bergoglio se complace vivamente por la histórica decisión de los gobiernos de Estados Unidos de América y de Cuba de establecer relaciones diplomáticas, con el fin de superar, por el interés de los respectivos ciudadanos, las dificultades que han marcado su historia reciente.

Francisco obtiene así un éxito personal, al desempeñar un papel clave como mediador, pocos meses antes de su primera visita en septiembre de 2015 a Estados Unidos.

Foto
Grupos anticastristas de Miami reaccionaron con manifestaciones públicas al anuncio político realizado por Barack Obama y Raúl CastroFoto Reuters

El acuerdo final se cerró en octubre en el Vaticano, con oficinas facilitadas por el mismo Francisco, contaron fuentes diplomáticas.

Las gestiones del Papa argentino son resultado de una larga gestión diplomática entre la Iglesia católica y el gobierno comunista de Cuba, marcada en los años recientes por el diálogo constructivo tras las visitas a la isla de Juan Pablo II en 1998 y Benedicto XVI en 2012.

El papa latinoamericano se catapulta como una de las personalidades más importantes del escenario mundial al favorecer el diálogo y buscar salidas, con la prudente asesoría de su secretario de Estado, el italiano Pietro Parolin, veterano diplomático que ejerció como nuncio en Venezuela. Dada su experiencia en el Caribe, se cree que el papel de Parolin en el acercamiento entre Estados Unidos y Cuba fue crucial para alcanzar el acuerdo.

Kenneth Hackett, embajador estadunidense ante el Vaticano, dijo en una declaración que un alto funcionario de éste se había reunido con ambas partes para ayudar a llevar las negociaciones a una conclusión exitosa. No proporcionó el nombre del funcionario.

Elisabetta Piqué, periodista argentina y autora de la biografía Francisco: vida y revolución, señaló que desde hace mucho tiempo al pontífice le preocupaban los efectos del alejamiento entre Estados Unidos y Cuba, dada su posición como clérigo prominente en Latinoamérica. Con frecuencia hacía énfasis en la necesidad de que hubiera un intercambio cultural y diálogo entre ambos.

Afirmó que se sabe ampliamente que Francisco y Obama hablaron sobre Cuba cuando se reunieron el 27 de marzo en el Vaticano.

Es típico del hombre tener el valor para intervenir personalmente, intentando contribuir a hacer algo concreto, como lo vimos hacer con (la cumbre de oración de) Medio Oriente, sin tener miedo a correr el riesgo, declaró.